Detenidos 13 acusados de explotar sexualmente a mujeres rumanas

Fingían estar enamorados de ellas y simulaban una relación sentimental para luego explotarlas sexualmente. Así actuaban las 13 personas detenidas en una operación policial contra la trata de seres humanos, en la que han sido liberadas 11 jóvenes rumanas obligadas a prostituirse.

Además de con este método, conocido como Lover Boy, la banda también captaba mujeres en su país de origen, en este caso Rumanía, con falsas promesas de una vida mejor en España que luego resultaban ser inciertas, según ha informado la Dirección General de Policía en un comunicado.

Las mujeres liberadas eran obligadas a prostituirse en varios clubes de alterne de Málaga y Girona por sus compatriotas, hasta que el testimonio de una persona que denunció la situación de explotación sexual de varias mujeres en un local malagueño alertó a la Policía Nacional.

Las primeras pesquisas apuntaban a un hombre de nacionalidad rumana como responsable del control de varias mujeres de su misma nacionalidad para obligarlas a ejercer la prostitución, aunque avanzada la investigación, los agentes descubrieron la existencia de una organización bien estructurada dedicada a esta actividad ilícita.

Los agentes comprobaron que algunas de las mujeres habían sido trasladadas desde Andalucía a Cataluña. Precisamente, dos de las víctimas fueron localizadas en Lloret de Mar, Girona, así como uno de los detenidos.

Bien fingiendo estar enamorados de ellas o bien prometiéndoles una vida mejor en España, la red traía a las mujeres a nuestro país para obligarlas a prostituirse en clubes de distintas provincias e, incluso, en otros países para aumentar el beneficio de su explotación.

Cada uno de los proxenetas controlaba a una o varias mujeres, que eran sometidas a un férreo control y obligadas a ofrecer sus servicios durante más de diez horas diarias.

Las mantenían completamente aisladas, mediante amenazas y coacciones, e impedían cualquier tipo de relación con el exterior, especialmente con otros compatriotas rumanos.

Además, les imponían las tarifas de sus servicios, así como los lugares donde ejercer la prostitución y los domicilios donde vivían.

Según la Policía, entre las víctimas liberadas se encuentra una joven de 18 años cuya familia había denunciado su desaparición en Rumanía.

Varios de los detenidos lograron convencer a la joven para que abandonara el domicilio familiar, una vez que había terminado su jornada escolar y desde ese momento su familia no había vuelto a saber nada de ella.

La operación se ha saldado con diez detenidos en Málaga y tres en Gerona -todos ellos rumanos a excepción de dos españoles- y con registros en cinco domicilios y en dos clubes de alterne de ambas provincias.

La Policía Nacional presentó el pasado año el Plan Policial contra la trata de seres humanos con fines de explotación sexual, que ofrece varias vías para denunciar esos casos, como el teléfono gratuito 900.10.50.90, que atiende las 24 horas, o el correo electrónico [email protected].

Comentarios