La decisión de Más Madrid, el partido de Íñigo Errejón, de concurrir a las elecciones del 10 de noviembre y de buscar alianzas con formaciones regionalistas podría arañar algunos escaños a Unidas Podemos y poner 'en peligro' los de dirigentes morados de peso como Pablo Echenique o Rafael Mayoral.
Unidas Podemos logró 33 diputados en los comicios del 28 de abril, a los que sumó los de En Comú Podem (siete) y Galicia en Común (dos), lo que representó un recorte sustancial respecto a los 71 escaños que las tres formaciones obtuvieron en junio de 2016.
La irrupción de la plataforma de Errejón podría menoscabar de nuevo el resultado de la formación morada, en especial, en la Comunidad de Madrid, donde consiguió seis escaños en abril.
En las elecciones autonómicas celebradas un mes más tarde, Más Madrid se hizo con 20 escaños y 475.000 votos, a amplia distancia de los siete diputados de Podemos-IU y sus 181.000 papeletas.
Con vistas al 10N, en caso de que Unidas Podemos repitiera las listas, como su dirección tiene intención de hacer, tendrían garantías de repetir escaño Pablo Iglesias, Irene Montero y Enrique Santiago, pero entrarían en riesgo los de Gloria Elizo, Rafael Mayoral, una de las personas de mayor confianza del secretario general, y María Mercedes Pérez.
En el caso de Aragón, Echenique, actual secretario de Acción de Gobierno de Podemos, ocupa el único escaño por Zaragoza que la formación morada obtuvo en abril.
En aquellos comicios, la Chunta Aragonesista (CHA) no se presentó para no fragmentar el voto de la izquierda, pero sí lo va a hacer ahora y su intención es aliarse con Errejón, por lo que podría amenazar el escaño de Echenique.
En Navarra, Podemos-IU-Equo también consiguió un escaño, el de Ione Belarra, que podría mantenerlo, puesto que no hay visos de que los de Más Madrid se presenten en la comunidad foral.
Galicia podría ser otra de las regiones donde 'el efecto Errejón' podría restar votos a la confluencia de Podemos (Galicia en Común), que obtuvo dos escaños en abril.
El de Yolanda Díaz, una de las principales colaboradoras de Iglesias, parece 'blindado' por Pontevedra, pero el de Antón Gómez-Reino en A Coruña es más frágil si finalmente los de Errejón se unen con En Marea, como esta agrupación desea.
En la Comunidad Valenciana, los errejonistas irán de la mano de Compromís, que solo rascó un escaño por Valencia en las últimas elecciones, el del diputado Joan Baldoví.
La entente con la formación de Mónica Oltra podría comprometer alguno de los cinco diputados de Unidas Podemos –dos por Alicante y Valencia y otro por Castellón–.
En el País Vasco, Podemos pretende repetir las listas y no está claro que los de Errejón se vayan a presentar.
No obstante, en Álava se podría ver 'en riesgo' Juantxo López de Uralde, que arrebató al PP el escaño por 7.000 votos, y que ha dejado claro que concurrirá con Podemos aunque Equo, la formación que lidera, se decante por ir con Errejón en otras circunscripciones.
En Comú parece dispuesta a repetir cartel con Unidas Podemos en Cataluña, por lo que cerraría el espacio a Errejón, al igual que en Baleares.
Otro foco que podría trastocar los planes de Unidas Podemos está en Andalucía, ante la intención de su secretaria general, Teresa Rodríguez, de que haya solo una plataforma de izquierda bajo el nombre Adelante Andalucía que aspire a tener grupo parlamentario propio en el Congreso.
En Málaga, Unidas Podemos logró en abril dos diputados, uno de ellos, el del coordinador general de IU, Alberto Garzón, cuya formación está dispuesta a integrarse en Adelante Andalucía.
En Canarias, la formación morada cuenta con la juez en excedencia Victoria Rosell y el secretario de Organización, Alberto Rodríguez, como cabezas de cartel, que repetirían si los de Errejón no presentasen candidatura en el archipiélago.
