El exsuegro de Jordi Pujol Ferrusola negoció un 3% por una compra de terrenos

Ramón Gironès Pagés, exsuegro del primogénito del expresidente catalán Jordi Pujol, ha desvinculado al que fuera su yerno de la operación de compra de unos terrenos en L'Hospitalet de Llobregat en la que ha dicho que fue él quien intermedió y pactó cobrar una comisión del 3%, aunque finalmente se embolsó el 1%.

Así lo ha afirmado en su declaración como imputado ante el juez de la Audiencia Nacional Pablo Ruz, al que le ha explicado que no tenía mucha relación con su entonces yerno con el que ha asegurado que no trata desde 2004, han informado fuentes presentes en el interrogatorio.

Sobre la operación de L'Hospitalet, ha sostenido que fue una cosa suya con unos conocidos cuando era director de servicios de un distrito de Barcelona y del consell comarcal de Barcelona de juventud y becas de comedor.

Según las fuentes, la compra de esos terrenos se la propuso su amigo Cutillas, propietario de la empresa Focio, al que había conocido en los años 80, que le comentó que tenía problemas con el Ayuntamiento de Barcelona para recalificar unas fincas de su propiedad.

Gironès, según su relato, le dijo entonces que conocía a una persona que podía ayudarle porque trabaja en el área de obras públicas del Ayuntamiento, Xavier Corominas, quien hoy también ha declarado como imputado en esta causa.

Ha explicado que puso a ambos en contacto, pero que desconoce la labor que hizo entonces Corominas, aunque ha detallado que Cutillas le dijo que si salía adelante la operación le daría el 3 por ciento.

"Se me abrió el cielo", ha manifestado Gironès al exponer la alegría por haber ayudado a un amigo y a Corominas le dijo que le daría la mitad de la comisión que sacase.

Sin embargo, cuando la operación llegó finalmente a buen puerto, Cutillas falleció el mismo mes en que se firma el contrato, y los hijos le emplazaron a una reunión en la que le indicaron que consideraban excesivo ese 3 por ciento y que estaban dispuesto a darle solo el 1 %, cantidad que ha dicho que aceptó porque era un dinero que no esperaba.

La factura por la cantidad acordada tampoco fue emitida a su nombre porque "por un tema de elegancia" su gestor fiscal le recomendó que, dado que era un empleado público, se hiciera a nombre de su mujer (que también ha declarado como imputada), y lo ingresó en la cuenta conjunta del matrimonio.

Según un informe de la Policía, basado en el testimonio de la hija de Cutillas, el exsuegro de Pujol Ferrusola acudió un día a su empresa, Focio, para "exigir el cobro de un 3 %" del importe de esa venta inmobiliaria en la que supuestamente intervino el primogénito del expresidente catalán y por la que se habría llevado una comisión de 30.050 euros.

Con relación a esta compraventa también ha declarado Corominas, arquitecto técnico del Ayuntamiento de Barcelona, quien ha dicho que conoce a Gironès desde 1988.

El arquitecto prestó labores de asesoría para la familia Cutillas, propietaria del terreno, y una filial de Copisa (empresa que facturó numerosos trabajos a Pujol Ferrusola), compradora de la finca, en el sentido de presentar un contencioso en el consistorio para conseguir su recalificación.

Gironès nunca le dijo, ha sostenido, que fuera a repartir con él comisión alguna y a él le prometieron que le pagarían el 1 % del total de la venta, que cobró mediante cuatro talones (uno a abonar en el momento y otros tres en tres años).

También han declarado los empresarios Carlos Sumarroca Coixet y su hijo Carlos Sumarroca Claverol, de la empresa Emte.

El primero ha explicado que hace 30 años se desvinculó de la actividad de la empresa y el segundo ha defendido el trabajo de asesoría que Pujol Ferrusola hizo para su compañía, y por el que cobró un total de 132.800 euros en 2008.

En concreto, ha explicado que el hijo de Pujol intermedió para conseguir que la empresa abriera una filial en México porque tenía contactos en ese país, y ha negado que este contrato respondiera en realidad a una comisión por adjudicaciones públicas.

En su defensa, ha añadido que los contratos de la Generalitat no son más de un 5 % del volumen de facturación de la empresa.

Otro de los imputados, el empresario Xavier Tauler, consejero delegado de Copisa, ha reconocido la intermediación de Pujol Ferrusola en la consecución de negocios inmobiliarios para su empresa por los que llegaba a embolsarse comisiones de entre el 1 y el 2 por ciento.

Las comparecencias de los once imputados citados hoy continuarán esta tarde con la declaración de cuatro más: Alejandro Guerrero, Gustavo Buesa, Josep Mayola y Luis Delso.

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