Fernández Díaz niega que se estén realizando 'devoluciones en caliente'

El ministro del Interior, Jorge Fernández, rechazó hoy que se estén realizando "devoluciones en caliente" de inmigrantes en la frontera con Ceuta y Melilla y aseguró que la Guardia Civil actúa en cumplimiento de la Ley.

En una rueda de prensa en Washington tras dos días de reuniones en la capital estadounidense, el ministro diferenció entre las personas que entran en territorio español, que están sujetas a la Ley de Extranjería, y los que lo intentan pero no lo consiguen.

"Lo que comúnmente se llama devolución en caliente es un rechazo en frontera, personas que intentan entrar ilegalmente, en no pocas ocasiones violentamente, en nuestro país", bien por las vallas o por la actuación de la Guardia Civil, dijo el ministro.

"Una cosa es intentar entrar ilegalmente y otra es consumar la entrada", dijo el ministro, que defendió que "no hay devoluciones en caliente, si se produjeran estaríamos cometiendo una ilegalidad".

El ministro señaló que el "rechazo en frontera" es una práctica que se viene aplicando "ininterrumpidamente" por la Guardia Civil desde hace muchos años y recordó que el sistema de doble valla con una sirga tridimensional data del año 2005.

La Defensora del Pueblo, Soledad Becerril, defendió hoy que la Ley de Extranjería es "muy garantista" y no contempla las llamadas "devoluciones en caliente" de inmigrantes.

El ministro aseguró que cuando una persona entra definitivamente en territorio nacional "se le aplica la Ley de Extranjería", al tiempo que aseguró que la Guardia Civil actúa "en cumplimiento de la Ley" para evitar en la frontera los intentos de entrada ilegal.

"No es una cuestión de soberanía, sino de defensa de la frontera a efectos de entradas ilegales" dijo.

Fernández Díaz enfatizó que no se puede defender de la misma manera la frontera sur que la entrada por los aeropuertos del Prat en Barcelona o Adolfo Suárez-Barajas en Madrid, y apeló al "sentido común" a la hora de interpretar las leyes".

En este sentido señaló que si a una persona que supera la primera valla se le aplicara la Ley de Extranjería "lo que tendría que hacer es retirar a la Guardia Civil y la segunda valla, porque no tendría ningún sentido".

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