Futuro Vegetal ataca con pintura negra las sedes de PSOE y PP

Con su acto quieren denunciar la financiación de la industria cárnica
Fachada del PP tras recibir el ataque. FUTURO VEGETAL
photo_camera Fachada del PP tras recibir el ataque. FUTURO VEGETAL

Dos militantes del colectivo contra la crisis climática Futuro Vegetal han atacado la tarde de este lunes con un extintor lanza-pintura de negro las fachadas de las sedes del Partido Popular y del PSOE, situadas en la calle Génova y Ferraz respectivamente, para denunciar la financiación de la industria cárnica.

En la fachada del edificio donde se ubica la sede del PSOE, las manchas de pintura negra se extienden por la entrada, borrando el logo del partido, mientras que en el caso del PP, la pintura alcanza también la puerta de entrada y el frontal situado encima con las siglas de la formación. El logo, en la parte superior, solo ha sido ligeramente pintado.

Por esta acción, la Policía Nacional ha detenido a cinco personas, según han confirmado fuentes policiales.

"Queremos quitar la careta a todos los políticos que dicen preocuparse por el medio ambiente y la habitabilidad del territorio pero siguen participando de un gobierno que financia industrias ecocidas como la cárnica", ha manifestado una de las portavoces del colectivo, según recoge un comunicado de la organización.

El colectivo afirma que están "cansadas de engaños y de falsas esperanzas" y critican que las corporaciones están dispuestas a dejar "un territorio en ruinas", acusando a los políticos como responsables del "expolio y la contaminación que las corporaciones agroalimentarias y eléctricas están haciendo de los recursos hídricos comunes".

Esta acción se enmarca dentro de la campaña de "resistencia civil no violenta" que el colectivo está dinamizando para todo el mes de abril y se da unas semanas después de que el director académico del Foro de la Economía del Agua y profesor de derecho de la Universidad de Granada, Estanislao Arana, advirtiera en la Conferencia del Agua en la ONU que en siete años unas 829.000 personas morirán en el planeta por agua y saneamiento contaminado.