Más o menos alejada de la 'cuestión europea' en sí misma, el resultado de las elecciones al Parlamento Europeo se ha traducido esta vez más que nunca en una cuestión de confianza en el equilibrio de fuerzas políticas vigente en los Estados miembro.
El descalabro de los laboristas en Reino Unido y los resultados peor de lo esperado en Italia para Berlusconi se han visto completados en España con la extensión del 'efecto Feijóo'.
La caída de los socialistas y de su líder y presidente del Gobierno, José Luís Rodríguez Zapatero, frente al repunte de un Mariano Rajoy que se ve cada día con más fuerza para enfrentarse a las generales de ¿2012?. ¿De la reconquista de la Xunta a la de la Moncloa?
El Gobierno, a reválida
Los resultados no dejan lugar a dudas. Los efectos de la crisis han hecho más mella en los votos que caían del lado de los socialistas que la herida que los casos de corrupción -espionaje en la Comunidad de Madrid, 'caso Gürtel'- haya podido dejar en el apoyo electoral al PP.
Con 23 escaños en la Eurocámara y el 42,23% de los sufragios, Mayor Oreja - y como consecuencia Rajoy-, mira dos escaños por encima del hombro a Zapatero y el PSOE, que se quedaron en 21 eurodiputados y el 38,51% de los votos.
No es que se haya incrementado significativamente el apoyo a la derecha - un 1,02%, 221.823 votos más que hace cinco años-, sino que los socialistas han perdido 708.612 votos, un 4,95%.
Según la secretaria de Organización del PSOE, Leire Pajín, un retroceso provocado por la propia recesión económica. Para la portavoz del PP en el Congreso, Soraya Sáenz de Santamaría, la evidencia de la necesidad de que el presidente del Gobierno se someta a una cuestión de confianza para ''demostrar a los ciudadanos si tiene la capacidad, las ideas y los apoyos para poder gobernar el tiempo que le quede'', ya hay quien 'pide la cabeza de Zapatero.
Confianza, censura
Y es que por mucho que Pajín apunte que ''en democracia no hay reválida. Cada cuatro años se vota y se elige quién quiere que gobierne su país'', y que estas eran ''unas elecciones europeas, de carácter exclusivamente europeo, y se tienen que leer en ese contexto'', el Gobierno ha visto mermado su apoyo.
La portavoz del PP en el Congreso, Soraya Sáenz de Santamaría, le recomienda someterse a una cuestión de confianza porque, además de perder apoyos ''en la calle Zapatero ha perdido sus apoyos parlamentarios hace tiempo'' y ''no hace leyes porque no sabe si las puede sacar adelante''. ''En tiempos de crisis es el peor Gobierno posible'', concluye.
Y no sólo ella. El portavoz de CiU en el Congreso de los Diputados, Josep Antoni Duran i Lleida, ha animado a Rajoy a presentar al presidente del Gobierno una moción de censura, asegurando que sería lo que él haría si fuera el líder del principal partido de la oposición, a la vista de los resultados de estos comicios.
En el otro lado, el vicesecretario general del PSOE, José Blanco, está convencido de que el Partido Socialista ''recuperará la confianza de los ciudadanos de aquí a 2012'' y ha descartado que, como dice el PP, ésta sea la ''antesala de un cambio político'', recordándole que, respecto a las elecciones de 2004, ''sólo ha ganado un punto''.
Generales de ¿2012?
La fecha de las próximas elecciones generales es otra de las cuestiones que quedan abierta después de la debacle socialista. De no plantearse la cuestión de confianza, dice Sáenz de Santamaría, Zapatero debería al menos adelantar las generales porque ''todo lo que sea gobernar de esta manera irá en detrimento del país''.
''Un Gobierno que en un año pasa dos veces por las urnas -las gallegas y las europeas- y pierde de una manera tan clara, y que está sólo y que no tiene mayoría para salir adelante, lo lógico es que cuanto antes hubiera unas generales''.
Abiertos a la colaboración
Menos ambicioso se ha mostrado su compañero y vicesecretario general de Comunicación del PP, Esteban González Pons, Sobre la posibilidad de que se adelanten las elecciones generales, González Pons ha señalado que ''de momento'' hay que analizar los resultados.
''Hoy por hoy, lo cierto es que los españoles dijeron que no quieren que la política siga como está'', por lo que estas elecciones favorecen la posibilidad de un acuerdo entre el PSOE y el PP para hacer frente a la crisis, desde su punto de vista.
Por su parte, Leire Pajín abre la mano al entendimiento en políticas económicas, más teniendo en cuenta la pérdida de apoyos parlamentarios, reiterando eso sí que ''no tiene nada que ver con la coyuntura electoral'', y que ''todos los Gobiernos europeos han sufrido un desgaste'' por la crisis económica.
Defendiendo que el varapalo no ha sido tan grande, niega la posibilidad de que se produzca un adelanto de las elecciones generales y vuelve a repetirlo: ''En democracia, no hay reválida''.
