La Fiscalía también ha calificado de asesinato el crimen de la expresidenta de la Diputación de León y de este partido en la provincia, Isabel Carrasco, y, al igual que las acusaciones particulares, ha solicitado una pena de 23 años para cada de las tres acusadas de este crimen ocurrido el 12 de mayo pasado.
Las tres imputadas por la muerte de Isabel Carrasco son María Montserrat González, de 59 años, que se confesó autora de los disparos que acabaron con la vida de la dirigente política, su hija, Montserrat Triana Martínez, de 36, y la policía local, Raquel Gago, de 42.
La representación de Loreto Martínez Carrasco, hija de Isabel Carrasco, pide también una indemnización de 150.000 euros para ella y la misma cantidad para Jesús López Brea, pareja de la expresidenta del PP de León, a pagar solidariamente entre las tres imputadas en concepto de responsabilidad civil. Por su parte, el PP reclama una indemnización de 100.000 euros para el partido.
Pide una indemnización de 150.000 euros para la hija y otros tantos para la pareja de la víctima, a pagar solidariamente entre las tres imputadas como responsabilidad civil
Según han confirmado fuentes judiciales, en sus calificaciones provisionales, la Fiscalía, que llamará a declarar en la vista oral a más de 60 testigos y peritos, mantiene la imputación de la policía local y afirma que conocía los planes homicidas de Montserrat González y de su hija para acabar con la vida de Carrasco.
MÁS TENENCIA ILÍCITA DE ARMAS. Tanto las acusaciones particulares como la Fiscalía consideran que se trata de un delito de asesinato y no de homicidio, al que habría que sumarle el de tenencia ilícita de armas.
María Montserrat González y su hija permanecen ingresadas en la cárcel de Mansilla de las Mulas, mientras que Raquel Gago recobró la libertad el pasado 29 de enero después de que la Audiencia provincial así lo decretase bajo fianza de 10.000 euros, revocando la decisión de la magistrada Sonia González, que instruye las diligencias.
Gago fue encarcelada tras entregar en Comisaría el arma que acabó con la vida de Isabel Carrasco y ofrecer unas explicaciones confusas sobre cómo había llegado a su poder. Afirmó que la había encontrado en su coche, donde supuestamente la había dejado su amiga Montserrat Triana Martínez.
Según su versión de los hechos, Montserrat Triana Martínez, con la que mantenía una relación de amistad, dejó el arma en su coche minutos después del crimen sin que ella se diera cuenta, y no la encontró hasta el día después, que fue cuando la entregó en Comisaría.
LA AGENTE IMPLICADA. El informe de la Fiscalía es contundente en cuanto a la supuesta implicación de la agente en el crimen y manifiesta que "conocía los propósitos homicidas de las otras dos acusadas y colaboró con ellos". Además, recuerda que se reunió "con las otras acusadas sobre las 16:15 horas del mismo día 12 en la casa de Triana" y recalca que mantuvo en su poder el arma sin decírselo a nadie hasta que la entregó en Comisaría el día 13 de mayo argumentando que la había encontrado casualmente en su vehículo.
"Conocía los propósitos homicidas de las otras dos acusadas y colaboró con ellos", apunta el informe
Isabel Carrasco murió tras recibir tres disparos el pasado 12 de mayo cuando atravesaba una pasarela peatonal sobre el río Bernesga para dirigirse a la sede del PP en el Paseo de Salamanca.
La Policía detuvo veinte minutos después a María Montserrat González y a su hija, Monserrat Triana Martínez como supuestas autoras.
