El operativo prevé llegar hasta Julen este domingo

Las máquinas trabajan sin cesar para dar con Julen.DANIEL PÉREZ (Efe)

"Estamos esperanzados en que este trabajo pueda llevarnos el menor tiempo posible si las condiciones son un poco más favorables que las que nos hemos encontrado hasta ahora", detalla un técnico

El operativo de rescate de Julen ha comenzado a perforar el túnel vertical de 60 metros paralelo al habitáculo en el que se encuentra el niño, un proceso que llevará 15 horas y que se iniciaba el sábado a las 14.00 horas, y al que seguirá la excavación a mano posterior de una galería horizontal durante otras 20 horas.

La perforación para encontrar al niño de dos años que cayó el pasado domingo a un pozo estrecho y profundo en Totalán (Málaga) ha comenzado a mediodía tras culminar los trabajos de desmonte, según han confirmado fuentes del operativo.

Su responsable, Ángel García, delegado del Colegio de Ingenieros de Caminos de Málaga, ha explicado a los periodistas que después de trabajar durante toda la noche se ha conseguido llegar a la cota menos veintitrés y así atravesar el macizo rocoso que ha dificultado las labores en las últimas horas.

"Estamos esperanzados en que este trabajo pueda llevarnos el menor tiempo posible si las condiciones son un poco más favorables que las que nos hemos encontrado hasta ahora", ha detallado el técnico, que ha avanzado un plazo de ejecución para esta excavación de entre 12 y 15 horas, siempre que no vuelvan a encontrarse "alguna veta o dureza".

"Tenemos que hacer una perforación de 60 metros y en ese espacio nos podemos encontrar afloraciones del macizo rocoso que ha ralentizado las operaciones de desmonte para el rebaje del terreno y creación de una plataforma en la que se está colocando la perforadora.

García ha informado de que a continuación tendrán que realizar la galería horizontal de acceso al pozo en el que está el niño, una actuación que llevarán a cabo a mano los mineros desplazados desde Asturias.

El trabajo de estos operarios tendrá, según García "unos rendimientos menores", ya que emplearán medios manuales, pistolas y martillos, "y en condiciones favorables, se invertirán unas 20 horas, aunque intentaremos hacerlo en el menor tiempo posible".

Para la bajada de los mineros se ha fabricado "un útil, un especie de cesta de 1,2 metros de diámetro, en la que podrán introducirse dos mineros, "y se está viendo la posibilidad de que un tercero esté a una cota superior" para ayudar.

Preguntado por la posibilidad de que el niño no esté precisamente a la cota menos 71, que es donde se encuentra el tapón de tierra que se detectó en el pozo, ha declarado que los técnicos desconocen la altura de este tapón e incluso "si no es un tapón y la tierra llega hasta el fondo del habitáculo".

Ha afirmado que los mineros tendrán tres metros para acceder hasta el pozo desde el habitáculo de trabajo que se ha diseñado. Es en ese espacio donde esperan encontrar al niño.

En cuanto a la posibilidad de que hubiera que hacer más galerías de acceso al pozo, ha advertido de que tendría un riesgo añadido que habrá que analizar en función del terreno y la geotecnia que se vaya encontrando.

García ha asegurado que desconoce si existe alguna acusación hacia el operativo de rescate, y ha precisado que desde que se abandonó la técnica de la succión de material del tapón y se optó por las excavaciones "esto ha pasado de ser un rescate a una obra de ingeniería civil humanitaria".

El ingeniero ha insistido en que el ánimo entre los rescatadores es "férreo", ya que "llegar a Julen cuanto antes es una motivación tremenda y no pesan las horas, no pesa el cansancio y no pesa el no dormir; lo importante es llegar cuanto antes y llevárselo a sus padres".