El jurado popular ha absuelto esta tarde al matrimonio acusado del acuchillamiento del joven al que habían sorprendido en su vivienda de la localidad coruñesa de Pontedeume en 2011 al considerar que concurrían las eximentes completas de legítima defensa y miedo insuperable.
Esta semana se ha celebrado en la sala primera de la Audiencia Provincial de A Coruña el juicio oral contra J.A.F.C. y M.C.F.G. por el homicidio de Fernando S.G., que había entrado en su domicilio en torno a las 2.30 horas de la noche del 10 de julio de 2011.
El jurado considera culpable de homicidio al marido, por haber clavado al joven el cuchillo que posteriormente ocasionó su muerte en un lugar cercano al domicilio, y también a su mujer como cooperadora necesaria, pues le proporcionó el arma, pero sostiene que concurren las eximentes de legítima defensa y miedo insuperable y su veredicto es la libre absolución de ambos.
POSIBLE RECURSO
Por su parte, la acusación particular se plantea recurrir la sentencia tras el veredicto del jurado, que ha absuelto a las dos personas culpables del homicidio por las eximentes de legítima defensa y miedo insuperable.
La acusación particular en nombre de las hermanas de la víctima, Fernando S.G., ejercida por Jorge Vázquez, solicitaba el homicidio sin eximentes o el asesinato para "resarcir la memoria del fallecido".
"Prepararemos un recurso para el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia, consideramos el veredicto respetable, pero jugamos con todas las bazas en nuestra contra", explicó el letrado, que considera "insólito" que la Fiscalía no hiciera "una acusación sino de abogado defensor a ultranza casi más que el propio abogado pagado por la familia", una situación que, ha afirmado, "ha sido un lastre importantísimo de cara a un jurado que le explican lo que es la Fiscalía y que no acusa".
"Luchar contra eso es casi imposible, como se ha demostrado", ha apostillado.
En el recurso "hay posibilidades" aunque es "complicado" pues "ahora hay que ver la sentencia, ver en qué está basado el objeto del veredicto y ver cómo razonaron" los miembros del jurado, si bien en último caso se puede llegar hasta el Tribunal Supremo, ha dicho.
Hasta que la sentencia sea firme puede pasar más de un año "siempre que la familia quiera recurrir", algo que todavía está por determinar, pues para eso, ha alegado, es necesario analizar con calma el escrito final.
