La inauguración de las obras de rehabilitación del puente romano de Lugo, prevista para hoy, quedó finalmente aplazada debido "a problemas de agenda" de la ministra de Fomento, Ana Pastor, que iba a participar en ese acto, junto con el alcalde de la ciudad, el socialista José López Orozco, según informaron fuentes municipales.
La inauguración de esa rehabilitación supone el final de más de un año de obras para ejecutar un proyecto que fue cofinanciado por el Ministerio de Fomento con cargo al llamado 1% Cultural.
El Ayuntamiento de Lugo cortó al tráfico el puente romano, fechado entre los siglos I y II d.C, el 1 de agosto del pasado año para que la empresa concesionaria, Misturas S.A, iniciase las obras de rehabilitación, que fueron adjudicadas en 688.068 euros y tenían un plazo de ejecución de cuatro meses.
El Ejecutivo local le concedió una prórroga a la empresa concesionaria, a causa de los hallazgos arqueológicos que se realizaron durante la ejecución de los trabajos, pero además de esa demora autorizada, la adjudicataria incurrió en varios retrasos, por lo que fue penalizada económicamente.
Finalmente, las obras fueron recibidas oficialmente el pasado 13 de septiembre.
Hasta la apertura de un nuevo puente, el 25 de junio de 2011, la vetusta infraestructura romana soportaba diariamente el paso de unos 12.000 vehículos al día, porque era el único paso urbano con el que contaban los vecinos de Lugo para cruzar de una orilla a otra del río Miño.
Esta misma semana, el gobierno local de Lugo tomó la decisión de peatonalizar el puente romano definitivamente.
