El Gobierno Local de A Coruña ha fijado los servicios mínimos para la huelga de 24 horas de esta noche en el sector de la limpieza, al tiempo que ha rechazado un incremento en la tasa de la basura como solución al conflicto.
El alcalde de la ciudad, Carlos Negreira, acompañado por otros miembros de su equipo, se ha reunido esta mañana con representantes de vecinos, hoteleros, comerciantes y hosteleros, para informar de los servicios mínimos de recogida y tratamiento de la basura.
La huelga en el sector de la limpieza, respaldada por los sindicato CIG, UGT, CC OO y S.T.L, arrancará a las 23 horas de hoy, lunes, y afectará los centros de trabajo de Cespa, concesionaria del servicio de recogida de basuras en A Coruña y As Mariñas, al complejo medioambiental de Sogama -incluido el vertedero de Areosa.
El Gobierno Local ha decretado los servicios mínimos tanto en la planta de tratamiento de Nostián -los mismo que los marcados desde el 22 de agosto, con 30 trabajadores- como en el servicio de recogida, donde se prevé recoger entre el 50 y el 60 por ciento de la basura de las calles".
Con esta huelga, que podría convertirse en indefinida, el sector de la limpieza quiere expresar su apoyo a la protesta de los trabajadores de Albada, concesionaria de la planta de reciclaje de Nostián, y rechazar los "abusos" derivados de la aplicación de la reforma laboral en el sector.
Los trabajadores de Albada mantienen una huelga indefinida desde el pasado 28 de julio y los sucesivos encuentros, mediaciones oficiales incluidas, no han surtido efecto: no aceptan la congelación salarial propuesta por la empresa y exigen la reincorporación de al menos 8 de los trabajadores despedidos, salidas que la dirección atribuye a la caída de la producción en los últimos años.
Las protestas de los trabajadores de Albada fueron secundadas desde el primer instante por sus compañeros de Cespa, concesionaria de la recogida de basuras en A Coruña y durante más de una semana los sabotajes, quemas de contenedores e incidentes -que causaron incluso algún herido- impidieron el normal funcionamiento del servicio lo que provocó que los residuos se acumulasen en las calles.
Mientras las negociaciones siguen estancadas, el portavoz del Gobierno municipal, Julio Flores, ha asegurado que la solución al conflicto "no puede pasar en ningún caso por un incremento en la tasa de la basura a los coruñeses".
"Si ambas partes tuviesen voluntad real para el acuerdo, podrían decidir que la mediadora de la Xunta pudiese tener capacidad de arbitraje vinculante para ambas partes", ha explicado Flores.
"Nuestra opinión es que la empresa y los trabajadores llevan mucho tiempo mareando la perdiz y sabemos que hay elementos suficientes encima de la mesa para que ambas partes lleguen a un acuerdo sin que repercuta sobre la tasa de basura", ha añadido.
Flores ha realizado un llamamiento al sentido común para que no se produzcan episodios de "matonismo" y ha criticado la postura de los grupos de la oposición a los que ha acusado de "alimentar una huelga política".
Estos, por su parte, han criticado la falta de diálogo por parte del Ejecutivo municipal al que han exigido que medie en el conflicto.