A Coruña ha celebrado este jueves un concurrido acto en la nueva plaza de las Atochas, hasta ahora de Millán Astray, para festejar un cambio de nombre con el que la ciudad quiere saldar su "deuda" pendiente con la memoria" al recordar a las víctimas del franquismo y "hacer justicia".
"Hoy comienza un camino de reparación y dignidad", ha asegurado el alcalde de A Coruña, Xulio Ferreiro, ante más de medio millar de asistentes a este homenaje, amenizado por la Banda Municipal de Música de la ciudad.
El Gobierno local de la Marea Atlántica y representantes de los grupos municipales de PSOE y BNG, así como de la Comisión por la Recuperación de la Memoria Histórica (CRMH) de A Coruña, del Ateneo Republicano o de la cultura han arropado esta celebración, que también ha contado con la presencia de una emocionada María Villaverde, hija de un anarquista asesinado en la Guerra Civil.
El grupo municipal del PP ha sido el único que no ha asistido al acto porque considera que renombrar calles franquistas "causa un grave perjuicio" especialmente, añaden, en calles comerciales "por el elevado coste que supone para los afectados".
Con el nuevo nombramiento de esta plaza de las Atochas, el Ayuntamiento de A Coruña considera que se empieza a dar cumplimiento al acuerdo plenario de 2009 y el inicio de la aplicación de la Ley de Memoria Histórica. Por ello, la CRMH ha hecho efectiva hoy la paralización del proceso de demanda contra el Consistorio herculino para que retirara más de una veintena de símbolos franquistas del callejero, tras la firma ayer con el Ayuntamiento de este acuerdo de suspensión, pues la asociación entiende que hoy comienza el cumplimiento de la obligación legal del consistorio en este sentido.
En todo caso, durante un tiempo habrá en esta plaza dos placas, una con el nuevo nombre y otra debajo, más pequeña, en la que figure la denominación anterior, así como que fue cambiada para dar cumplimiento a la Ley de Memoria Histórica.
"Es un homenaje a tantas y tantas víctimas de la dictadura", ha subrayado el alcalde de A Coruña, Xulio Ferreiro, quien ha reivindicado la lucha por los sueños imposibles de entonces porque también hoy "hay que pelear hoy por lo evidente".
Hasta final de año se renombrarán más calles, pues según el pleno local de 2009 estas modificaciones afectan a veintidós, si bien algunas de ellas se dejarán para el próximo año por motivos simbólicos o porque coincidan con algún aniversario.
Algunas de las que se cambiarán son General Sanjurjo, General Mola, Teniente General Gómez Zamalloa, Cabo Santiago Gómez, División Azul, Juan Canalejo, Plaza de los Caídos o Disciplina, pero en todo caso la hoja de ruta se hará pública próximamente porque estos cambios no son suficientes para cumplir la ley, ha explicado.
Quedan otros, como el escudo de la vidriera del Ayuntamiento, la galería de retratos o el nombramiento de Manuel Fraga como hijo adoptivo de la ciudad, cuestión esta última reivindicada por la CRMH.
A Coruña renombra su callejero con una fiesta en la plaza de las Atochas
El PP fue el único ausente en el acto pues considera que renombrar calles franquistas "causa un grave perjuicio" por el "elevado coste" que supone
