Detenidos en la comarca de Santiago nueve jóvenes por tráfico drogas

Agentes del Cuerpo Nacional de Policía de la Comisaría de Santiago han detenido esta semana a un total de nueve jóvenes implicados en un presunto delito contra la salud pública, según informaron este sábado fuentes policiales.

Los nueve detenidos son jóvenes cuyas edades oscilan entre los 18 y los 24 años, sin antecedentes policiales anteriores. Todos ellos son vecinos de Santiago de Compostela y los concellos limítrofes de Ames, Vedra y Teo. Dos de los jóvenes, ambos  residentes en Vedra, han ingresado en prisión tras prestar declaración ante el juez.

Las investigaciones se desencadenaron a raíz de que el pasado sábado día 21 de junio un joven de 19 años aparecía muerto en un piso del Ensanche compostelano, después de haber estado la noche anterior de fiesta en una zona de "botellón", y posteriormente en locales de ocio nocturno hasta altas horas de la madrugada.

Las primeras averiguaciones apuntaban, según la policía, a que este chico habría consumido y mezclado bebidas alcohólicas y drogas, lo que le habría provocado la muerte.

Según señala la policía en un comunicado, se da una "alta probabilidad" de que la muerte le hubiese sobrevenido debido a la ingesta de una droga de diseño conocida como "MD" conjuntamente con bebidas alcohólicas, en cantidades no precisadas, si bien las causas concretas de la muerte se determinaran en el correspondiente informe forense.

Registros policiales
A partir de este hecho, los funcionarios policiales pusieron en marcha una investigación en el transcurso de la cual se llevó a cabo un registro en un piso de Vedra, en el que pudo establecerse la procedencia de la droga que pudo haber ingerido el joven fallecido, realizando posteriormente un total de nueve detenciones de personas relacionadas con los hechos.

En dicho registro la policía intervino 67 pastillas de Éxtasis, (droga de diseño conocida técnicamente como MDMA o 3,4-metilen dioxianfetamina); 120 dosis de Éxtasis cristal (polvo con pequeñas rocas, para consumir preferentemente por vía oral); 50 dosis de cocaína, además de hachís y nueve plantas de marihuana.

Los agentes también comprobaron que la vivienda estaba totalmente preparada para albergar todo tipo de estupefacientes, contando además con una caja fuerte instalada en el armario de una de las habitaciones, dos balanzas de precisión electrónica, una balanza mecánica, envases herméticos anti-humedad para la óptima conservación de las sustancia, y utillaje de corte y preparación de las dosis.

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