El PSdeG denuncia que la sombra de la austeridad llega hasta la ropa de cama en los hospitales

El PSdeG ha denunciado hoy el "deterioro" de los cuidados hospitalarios, como la peor calidad del material de enfermería, la falta de ropa de cama o toallas, que obliga a que se cambien con menos asiduidad, o la aparición en los centros de fiambreras que usan algunos pacientes sometidos a dietas especiales.

La diputada socialista Maria del Carmen Acuña ha denunciado en rueda de prensa que, pese al esfuerzo diario del personal sanitario, "cada día" estos cuidados son "peores" ya que "se están evidenciando muy duramente los recortes".

"Ahora ya ni se mudan las sábanas" con la "soltura" de antes, apuntó la parlamentaria, que indicó que no se hace a diario en el caso de pacientes que no lo solicitan o no lo precisan y también apuntó que "no se encuentran ni toallas" y "falta ropa: la austeridad se aplica hasta en el lavado".

Igualmente, subrayó que el material fungible "cada día es más escaso y de peor calidad", lo que aseguró que ya ha sido denunciado por personal sanitario, pese a que la administración autonómica lo niega, apuntó.

La diputada del PSdeG agregó que las vendas elásticas en las plantas de los hospitales son "de tan mala calidad" que causan problemas y se preguntó si no se acabarán lavando; las gasas ya no son de algodón, afirmó, y las palomitas, el sistema para coger las vías, "se doblan" o los émbolos de las jeringas "no van".

Igualmente, subrayó que las mascarillas deben ser perforadas para que funcionen, porque "no son permeables", los guantes rompen fácilmente o las camas "no andan bien", afirmó Acuña, que también denunció escasez de sillas de ruedas.

"Además, aparecieron las fiambreras", subrayó, puesto que las dietas especiales, como la más común, la antidiabética, están "tan medidas y tan recortadas que a los pacientes se les indica que las traigan de casa".

Los socialistas han recibido este verano, dijo, denuncias de que a algún paciente no se le había facilitado la dieta antidiabética de un familiar ingresado, ante lo que personal sanitario tuvo que decir "con gran dolor de corazón", que debería traerlo de casa.

Carmen Acuña, igualmente, denunció que este verano los servicios de urgencia estuvieron "reiteradamente colapsados", entre otros motivos por el cierre de camas.

A este respecto contó el "calvario" que sufrió una paciente en el hospital de A Coruña que, pese a estar sometida a un tratamiento inmunodepresor, tuvo que pasar más de 24 horas "hacinada" en un recinto de 50 o 60 camillas en el servicio de urgencias, cuando por precaución debería estar sola para no correr riesgos de contagio.

Igualmente, denunció que la ampliación de las urgencias del hospital coruñés lleva más de medio año "paralizada" y se puede comprobar que a diario solo trabajan tres o cuatro operarios.

En el curso político que comienza, avanzó, el PSdeG seguirá "peleando" en favor de la sanidad pública, al lado de los profesionales, motivo por el cual solicitarán del Parlamento un escrito en el que el personal sanitario denuncia escasez de material o su falta de calidad, pese a que la administración "niega que existe".

Igualmente, los socialistas han presentado una iniciativa para que se establezca un protocolo para el correcto aislamiento de los pacientes inmunodeprimidos en las urgencias, y otra en la que preguntan por la situación de las dietas en los hospitales gallegos.

Para concluir, Acuña reiteró sus críticas por lo que considera un "despiadado ataque" a la atención primaria por parte de la Consellería e insistió en que los pacientes tienen dificultades para conseguir consulta con los médicos, ya que no se cubren vacaciones, ni bajas, ni muchas de las jubilaciones.

Por ello, dijo, cuando un paciente solicita consulta y su médico de cabecera no está "no tiene derecho a consulta" durante unos días a la semana.

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