Un intenso oleaje ha sido protagonista en Galicia este domingo, a lo largo de una tarde en la que han remitido la lluvia y el viento, cuya presencia fue mayoritaria por la mañana.
Galicia vivió desde la mañana de este domingo una alerta amarilla por precipitaciones, de hasta cuarenta litros por metro cuadrado en la costa occidental, y otro aviso del mismo nivel por vientos del sur superiores a los ochenta kilómetros por hora, aunque este aviso ha estado vigente solamente hasta mediodía.
Toda la costa tiene, no obstante, alerta naranja por olas de entre cinco y siete metros, y en este caso hasta la medianoche.
Los topes máximos de lluvia durante la jornada han estado en 34,8 litros por metro cuadrado en la estación de Paramos, en el municipio coruñés de Val do Dubra, y en 33 en Camariñas, en la Costa da Morte, situada en la misma provincia.
La ráfaga de viento más potente del área ha sido la registrada en la estación de Muralla, en el municipio coruñés de Lousame, con 113,4 kilómetros por hora, aunque en toda la zona los vientos han rondado los cien kilómetros por hora, superados incluso en varios puntos.
En la parte oriental de Galicia, en la estación de Lardeira, en el municipio ourensano de Carballeda de Valdeorras, las rachas de viento han sido todavía mayores, con una fuerza de hasta 127,2 kilómetros por hora.
De todos modos, tras la primera mitad del día lo más destacado han sido las olas. Así, pasadas las seis de la tarde, todavía con margen hasta la pleamar prevista para las 19.27 horas, la fuerza del oleaje de la playa de Riazor, en la ciudad de A Coruña, ha sido tal que el agua del mar ha alcanzado la carretera, y ello tras sobrepasar la acera y el carril bici más cercano al arenal. La Policía Local se ha visto obligada a cortar la circulación.
En cuanto al frío, hasta -3,6 grados centígrados se han registrado en Cabeza de Manzaneda. Sobre las máximas, éstas han superado los diez grados en el área occidental de la comunidad, con unas temperaturas medias que apenas han pasado de los cinco grados.
LA ALERTA CONTINÚA. La situación climatológica adversa continuará este lunes, con alerta amarilla por lluvias de entre cuarenta y ochenta litros por metro cuadrado en doce horas y más de quince litros en la misma hora a partir del mediodía, a lo que se unen ráfagas de viento que podrían superar los ochenta kilómetros.
La predicción de Meteogalicia habla de nubes y claros en toda la comunidad durante la mañana, con lluvias en el suroeste y tormentas por la tarde en la costa, con la cota de nieve en Ourense en torno a los 1.200 metros.
Lugo tendrá la temperatura mínima en dos grados centígrados y Ourense verá dieciséis como máxima, con unas medias en torno a los diez grados, a pesar que hace tres semanas que arrancó la primavera.
El martes todavía se mantiene el aviso de nivel amarillo una vez más por vientos, con rachas superiores a los ochenta kilómetros por hora en algunos momentos.
El temporal mantiene la costa gallega en alerta
La intensa lluvia y el fuerte viento marcaron la mañana de este domingo. Por la tarde, las olas fueron las protagonistas, que incluso obligaron a cortar la circulación en Riazor
