El presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, ha reivindicado su gestión durante la que ha sido probablemente la última sesión de control de la legislatura en el Parlamento gallego, en la que también ha aprovechado para cargar contra Podemos y las Mareas antes de las elecciones del próximo otoño.
Núñez Feijóo ha afirmado que Galicia está "en términos generales mejor que en 2009" y si bien la situación aún "no es óptima" está "más esperanzada" que hace siete años porque, en su opinión, "hay más oportunidades para trabajar" y hay "más posibilidades de atender la educación y la sanidad".
Entre otras cuestiones, Núñez Feijóo ha afirmado que en Galicia "hay menos parados ahora que en 2009", una cuestión que ha enfatizado: "Pocos gobiernos en España pueden decir que finalizan con menos paro que cuando empezaron hace ocho años".
El viceportavoz de AGE, Antón Sánchez, ha lamentado la pérdida de población desde que gobierna Núñez Feijóo, "unos 14.000 menos de media cada año", que ha puesto como ejemplo del "fracaso" de las políticas del PP, "incapaz de dar condiciones de vida dignas a las personas, especialmente a los jóvenes".
En opinión de Sánchez, Núñez Feijóo es incapaz de "llevar adelante proyectos de transformación del país" y de "dar oportunidades a la gente", por lo que ha censurado que el PP meta a Galicia "en un pozo, en un círculo vicioso del que será difícil salir".
Núñez Feijóo ha replicado que ha estado "en las duras" al frente de Galicia y ha asegurado que si los gallegos quieren también estará "en las maduras", y ha defendido que si no tuviera la seguridad de que puede "volver a ser útil" no se presentaría de nuevo a las elecciones, tras lo que un diputado de AGE ha exclamado "Feijóo el bolivariano".
Núñez Feijóo ha achacado a AGE, estar afectado por "el mismo mal que sus compañeros", -en alusión a las Mareas y a Podemos- que consiste en decir, según el presidente gallego, "cosas que no pasan".
"Son la tercera fuerza y decían que iban a ser la primera, decían que son los de la sonrisa permanente y son los del enfrentamiento permanente; presumían de ser el referente de la democracia interna y ahora algunos les acusan de purgas internas. Decían que las decisiones se tomaban en las plazas... No, se toman en el despacho de Pablo Iglesias: de plazas nada, de sonrisas nada y de regeneración de la vida política, cero", ha concluido.
