El Ministerio de Fomento pondrá en servicio el próximo viernes el tramo Abadín-Careira (Lugo) de la Autovía del Cantábrico, que tiene cinco kilómetros de longitud y que ha supuesto una inversión de 43,4 millones de euros.
Con este tramo serán 58,4 los kilómetros de esta autovía abiertos en Galicia, cerca del 70% del trazado en esta Comunidad autónoma, según informó el Ministerio por medio de un comunicado.
El nuevo tramo corresponde a la variante de Abadín de la A-8, con lo que se elimina esta peligrosa travesía que ha generado algunos problemas de seguridad vial, ligados especialmente a los frecuentes cruces peatonales que se producían en el centro de la población, que soportaba intensidades de tráfico de unos 8.000 vehículos al día, con un porcentaje de pesados del 17 por ciento.
Con esta apertura se da continuidad hacia el norte a los tramos que fueron puestos en servicio en octubre de 2010 entre Abadín, Castromaior y Touzas, a la vez que el enlace de Abadín pasa a estar completamente operativo.
Este tramo de la A-8 incluye los viaductos de Fontepresa, con 615 metros de longitud y una altura máxima de 40 metros, y el de Rego da Xesta, de 160 metros de largo y 15 metros de altura.
Las actuaciones medioambientales han supuesto un presupuesto de casi un millón de euros, con medidas de revegetación y plantaciones autóctonas realizadas para la integración paisajística de las obras, así como la colocación de pantallas acústicas de protección frente al ruido.
El Ministerio de Fomento ha invertido hasta el momento 484 millones de euros en la construcción de la A-8 en Galicia.
