Galicia ofrece un amplio abanico de posibilidades para practicar el turismo rural, una forma ideal de descansar y ponerse en contacto con el entorno, sobre todo cuando el viajero busca con preferencia la naturaleza intacta y las curiosidades naturales. Las características geográficas de Galicia la convierten en un auténtico paraíso para descubrir y practicar nuevas formas de turismo.
La variedad y frondosidad de sus paisajes interiores, con los infinitos matices de sus verdes, los innumerables ríos y arroyos, un hábitat diseminado y sin los agobios urbanos, un relieve suavemente accidentado, fiestas y romerías que mantienen antiguas costumbres y tradiciones —muchas de ellas relacionadas con las labores del campo— facilitan el poder ofertar una gama variadísima de posibilidades, y unos alojamientos confortables pero inusuales en las casas de campo y en sus pazos, las construcciones señoriales típicas de Galicia que se encuentran situadas en el medio rural.
Una oferta original
El rico patrimonio arquitectónico rural de Galicia es precisamente lo que hace que la oferta gallega de alojamientos de turismo rural sea singular y una de las más atractivas de España. Por un módico precio, quien lo desee se puede alojar en una construcción del siglo XVIII, en una antigua fábrica de salazón con el horizonte abierto a la inmensidad del Atlántico, en una casa de labranza para participar de las labores agropecuarias propias de la zona, o a lo largo de las distintas rutas del Camino de Santiago.
Otoño Gastronómico
Galicia ofrece además numerosas actividades que complementan estas estancias de ensueño. Uno de sus productos turísticos más consolidados y con mayor éxito, edición tras edición, es el Otoño Gastronómico. Alrededor de 100 establecimientos de turismo rural ofrecen cada otoño en Galicia una interesante propuesta culinaria con interesantes ofertas para toda la familia. Cada edición, las casas de turismo rural de Galicia adheridas a la promoción ofrecen diferentes posibilidades.
Desde un menú Otoño Gastronómico para almorzar o cenar que consta de entrante, primer plato, segundo plato, sobremesa y, vino con Denominación de Origen gallego, pasando por un paquete Otoño Gastronómico que incluye el menú y el alojamiento y desayuno en la casa de turismo rural elegida, hasta una oferta completa de fin de semana de Otoño Gastronómico, que incluye dos menús por persona, más el alojamiento y desayunos. Además, este innovador producto ofrece la posibilidad de compartir la experiencia con la familia y poder escoger, en este caso, la opción fin de semana familiar Otoño Gastronómico, que incluye ofertas para uno o dos niños.
Las casas rurales de Galicia comercializaron un total de 653 menús
Balance de la última edición
En este año Turismo de Galicia puso en marcha por noveno año consecutivo esta campaña basada en el aprovechamiento de la oferta gastronómica que proponen las casas de turismo rural de Galicia, buscando incidir en la promoción de este tipo de turismo y contribuyendo a la desestacionalización del turismo rural gallego que concentra principalmente su actividad en los períodos de verano, en Semana Santa y Navidad. Esta novena edición contó con la participación de 89 establecimientos gallegos, 21 en la provincia de A Coruña; 22 en Lugo; 22 en Ourense y 24 en Pontevedra. Al finalizar la campaña se realizó un estudio en colaboración con las casas participantes para obtener una valoración precisa, tanto cualitativa, como cuantitativa. La evaluación de los resultados de la campaña refleja que un año más fue un auténtico éxito. Las casas rurales de Galicia comercializaron un total de 653 menús, 1.053 paquetes Otoño Gastronómico, y un total de 962 fines de semana, que incluían los almuerzos y dos noches de alojamiento. Con todo, la campaña acogió en Galicia a un total 4.577 de clientes y tuvo un retorno de más de 333.000 euros.
Turismo ornitológico
Galicia, situada a caballo entre dos regiones biogeográficas —la eurosiberiana y la mediterránea— cuenta con una orografía muy variada. Áreas montañosas con extensos bosques y matorrales, cañones y valles fluviales de gran interés, humedales diversos y paisajes agropastoriles bien conservados, así como más de 1.300 kilómetros de costa, forman un mosaico de hábitats singulares que convierten a la comunidad gallega en el lugar perfecto para la observación de aves. Su posición estratégica, uno de los puntos más occidentales de Europa, hace de esta tierra un extraordinario lugar para el avistamiento de las migraciones de aves marinas.
En Galicia se localizan multitud de espacios naturales protegidos, entre los que destacan un Parque Nacional, seis Parques Naturales, catorce Zonas de Especial Protección para las Aves y cinco humedales declarados de importancia internacional por el Convenio de Ramsar. Todo esto hace que Galicia ofrezca excelentes oportunidades para la observación de aves en todo su territorio y a lo largo de todo el año. La observación de aves silvestres en su ambiente natural supone un uso sostenible de los recursos naturales, y permite acercarnos a la naturaleza y a los paisajes desde un punto de vista singular, cercano y privilegiado.
Rutas BTT
Galicia también ofrece una posibilidad única de descubrir nuevos caminos y paisajes sobre dos ruedas. En la red de Centros BTT de Galicia es fácil encontrar el plan perfecto: espacios al aire libre diseñados y preparados para la práctica de bicicleta de montaña. Se trata de una actividad saludable y sostenible, ideal para conocer la belleza del medio natural gallego. Tanto principiantes como expertos podrán encontrar el itinerario que mejor se adapte a cada persona entre las múltiples rutas habilitadas, de diferentes niveles y dificultades.
Incremento de la demanda
Con todo, el turismo rural está registrando una mejora notable de su demanda. Así, el pasado año 2015 los establecimientos de turismo rural de Galicia superaron en un 20,8% su cifra de viajeros alojados y en un 16% el nivel de pernoctacións de 2014. Lugo es una de las provincias que más opciones ofrece para elegir con establecimientos a disposición de los clientes, como la Finca O Bizarro, Casa Condiño, Fervenza Casa Grande o la Casa Grande de Rosende, ubicada en Sober, al lado de los cañones del Sil, un lugar perfecto para realizar rutas de senderismo y contemplar paisajes impresionantes.
La provincia cuenta con muchos más entornos privilegiados, desde el mar, al norte, hasta la montaña en Os Ancares y O Courel. mar y montaña. A Coruña tampoco se queda atrás en variedad con establecimientos que van esde el Muíño das Cañotas, en Cariño, hasta otros más cercanos a la ciudad como A Casa da Torre Branca, que se encuentra en las afueras de Santiago de Compostela y ofrece a los asistentes la posibilidad de combinar el relax de la estancia en plena naturaleza con visitas culturales en la ciudad Patrimonio de la Humanidad. Pero para los que quieran estar en contacto con la naturaleza, el principal atractivo en A Coruña está en el mar.
La Costa da Morte satisface al visitante con gran cantidad de paisajes de fotografía que merece la pena visitar con tranquilidad. Por no hablar de la riqueza gastronómica que aporta el Atlántico. El pescado fresco y el marisco pueden ser todo un manjar para una escapada única.
También Pontevedra cuenta con paisajes de ensueño tanto en las Rías Baixas como en el interior de la provincia y la zona del Baixo Miño. Por eso hay múltiples opciones para elegir, porque las casas de turismo rural se extienden por todo el territorio, desde Casa A Pastora, en Cambados, para los que quieran estar cerca del mar, hasta la Rectoral de Fofe, en O Covelo.
Esta última está situada en un valle rodeado de montañas por el que discurren varios riachuelos. También en el interior de la provincia se encuentra A Casa de Abaixo, en Forcarei. En la zona del río Miño se encuentra la Casa Cruceiro, en Arbo, donde la lamprea es la reina de los platos y el vino Condado riega cada menú. Desde este establecimiento es posible visitar gran cantidad de lugares de interés incluso al otro lado de la frontera, en territorio portugués. Ourense tiene también una amplia oferta de casas rurales repartidas por toda su geografía.
Al norte, en la localidad de Parada de Sil, ya cerca de la frontera con la provincia de Lugo, se encuentra la Reitoral de Chandrexa, que está en los cañones del Sil, una zona con rutas en catamarán y miradores desde lo alto de los cañones. Al sur de la provincia ourensana se encuentra la Casa da Feira, en Lobios. Este establecimiento cuenta con amplias habitaciones y baños y un espacio al aire libre. Se encuentra en plena Serra do Xurés y su construcción data de 1874.
En Allariz, un pueblo con encanto por sus construcciones tradicionales y sus calles de piedra, se encuentra la Casa das Augas Santas, que también participa en la iniciativa Outono Gastronómico. Durante el otoño no hay excusa, ya que los planes para cada fin de semana son fáciles de decidir con una amplia variedad de casas rurales que tienen a disposición de sus clientes ofertas gastronómicas y estancias. Lo más difícil será decidir en qué establecimiento alojarse. Las cuatro provincias cuentan con este tipo de establecimientos.
