La Xunta quiere inmunizar "a toda máquina" y adelantarse al certificado verde digital que prepara la UE para todos los países miembros con una acreditación de vacunación que será sustituida cuando el otro pasaporte que busca favorecer la movilidad entre en vigor, previsiblemente en junio.
El documento gallego informará al ciudadano del fármaco que se le ha administrado y del lote, y también mostrará si la persona interesada ha superado el virus y las pruebas negativas, tal y como ha contado el conselleiro de Sanidad, Julio García Comesaña, este martes en la comparecencia posterior a la reunión del comité clínico que asesora a la Xunta en la gestión de la pandemia.
Su carácter será por ahora "meramente informativo", ha indicado, y estará disponible en formato digital desde las plataformas PassCovid, E-Saúde y Sergas Móbil; y, en modo impreso, a través de la historia clínica o bien de las áreas administrativas.
El responsable del ramo sanitario en el gobierno de Alberto Núñez Feijóo ha anunciado en su intervención que durante la Semana Santa, también los festivos del jueves y del viernes, proseguirá la vacunación pues ve "fundamental" ir a toda velocidad y "por eso insistimos en reclamar más vacunas", ha destacado.
La estimación que calculan para esta semana pasa por inocular 32.000 primeras dosis para mayores de 80 años, 17.000 de la segunda y 4.900 entre los esenciales.
La incidencia acumulada en la comunidad, según los datos facilitados, es de 69,09 a 14 días y de 31,04 a siete, frente a 149 y 80 de la media española; y en los últimos catorce días son 140 los ayuntamientos sin casos de covid-19, por 180 libres del patógeno a siete.
La directora general de Salud Pública, Carmen Durán, ha subrayado que las predicciones indican que la curva ha pasado de "descender rápidamente" a llevar diez días "en meseta", con un porcentaje de caída diaria del 0,6 por ciento.
La positividad de las pruebas es del 2,73%, por el 2,53 de hace una semana, ha detallado, y por áreas sanitarias ha contrapuesto la incidencia acumulada a 14 días de la de Ourense, que es de 39 casos por cada cien mil habitantes, por los 105,98 de la de A Coruña en ese mismo rango.
No obstante, parece que A Coruña desciende, aunque siga lejos de la media gallega, han dicho, al contrario de lo que pasa en el área sanitaria de Vigo y en la ciudad, con un incremento del que se hará un "seguimiento exhaustivo".
Sobre la situación asistencial, el gerente del servicio gallego de salud (Sergas), José Flores, ha preferido recurrir, en su papel de responsable de este organismo a cargo de la asistencia sanitaria pública, a un "optimismo contenido".
El doctor Tato Vázquez Lima también ha optado por hablar de estabilidad y de una situación "relativamente tranquila, si se puede decir así", pero ha pedido a la población seguir colaborando "hasta que se pueda avanzar de manera progresiva" y sostenida con la vacunación.
"En ocho, diez, doce semanas" la vacunación podría avanzar con gran rapidez "si entran las vacunas que tenemos previsto", ha dejado caer.
Y ha querido dirigirse al sector de la hostelería y la restauración, duramente golpeado, porque están haciendo "muy bien las cosas".
Como siempre, ha aconsejado huir de espacios interiores en los que la "transmisibilidad aumenta de manera exponencial" y priorizar los exteriores.
Los cribados en los aeropuertos gallegos, que comenzaron en el coruñés de Alvedro el pasado viernes, se han ampliado a Lavacolla, en Santiago, y Peinador, en Vigo, en esta jornada.
En esta rueda de prensa, tanto Comesaña como Lima han aludido igualmente, ante las preguntas formuladas, al endurecimiento en el uso de la mascarilla sea cual sea la distancia de seguridad.
Como la mayoría de las consultas eran por su utilización en las playas, el conselleiro ha indicado que las calas "también son territorio de Galicia" y que se trata de una norma de obligado cumplimiento, y el médico ha añadido que no es momento de una relajación.
Comesaña ha criticado, con todo, el proceder, y que no hubiese contacto previo por parte del Ejecutivo de Pedro Sánchez, salvo una llamada de la ministra Carolina Darias para avisar de la publicación en el Boletín Oficial del Estado (BOE) sin más "comunicación".
