El que fuera alcalde del municipio lucense de Foz, José María García Rivera, confirmó a EFE que ha solicitado la baja de militancia en el PSdeG-PSOE, después de que el partido tramitase los expedientes de expulsión de dos ediles que "empezaron" con él en política "hace más de veinte años".
Cuatro ediles del PSdeG-PSOE en ese municipio lucense, dos de ellos militantes y los otros dos independientes dentro de la lista socialista, anunciaron su intención de abandonar la formación política tras conocer que Xaime Cancio, antiguo concejal de ese partido, había sido admitido de nuevo.
García Rivera recordó que alguno de esos ediles inició con él su camino en política y "si quieren expulsar a cuatro, también los demás nos vamos, porque estuvimos siempre con ellos".
"Es lógico, cae de cajón", dijo García Rivera, "porque alguno llevaba conmigo más de veinte años".
En cuanto al regreso de Cancio, García Rivera, sostiene que ese hecho "se comenta por sí solo" y comparte el criterio de los cuatro ediles que decidieron abandonar el Partido Socialista en Foz.
"Una persona que se fue e hizo un daño terrible al partido, que no quiso pactar un gobierno de progreso y que ahora vuelve al PSdeG, después de dejar a otro partido a mitad de mitad de mandato, me parece que no merece más comentario", dijo García Rivera.
Por otra parte, el ex alcalde confirmó que otros muchos militantes se han solidarizado con los concejales salientes y más de cuarenta personas han enviado ya cartas al PSdeG para solicitar su baja como militantes.
El responsable de la agrupación local del partido en ese municipio, José Ramón Val Alonso, afirmó que el comportamiento de los cuatro ediles expedientados es "totalmente contrario a los estatutos del partido".
Los concejales, en cambio, consideran que Cancio es un "tránsfuga" que le "entregó la Alcaldía al PP", después de "gobernar como independiente dos años con el apoyo socialista".
García Rivera, alcalde de Foz durante 16 años, se da de baja en el PSdeG
