El abogado de oficio que se ha hecho cargo de la defensa de Félix Vidal Anido, conocido como el violador del estilete ha confirmado a EFE que esta mañana ha presentado el recurso ante el Juzgado de Instrucción Número 1 de Lugo, que envió a prisión a su cliente el pasado sábado, para solicitar su excarcelación.
El letrado Marcos Candal aclaró que ha presentado un recurso de reforma ante el Juzgado de Instrucción Número 1 de Lugo que, en caso de ser desestimado, se transformará en uno de apelación para que sea la Audiencia Provincial de Lugo la que resuelva sobre la situación de su cliente.
Candal también confirmó que ha fundamentado la solicitud de excarcelación en la coartada que presentó el propio Vidal Anido en su declaración ante la policía y ante la propia jueza instructora e indicó que su recurso se resolverá "rápido" por parte de la autoridad judicial, dada la celeridad con la que revisan por parte de la Administración de Justicia las causas "con preso".
En cuanto a esa posible coartada, fuentes policiales confirmaron que Vidal Anido declaró que estaba viajando en autobús de Lugo a Meira en el momento en el que se produjo el asalto a una mujer en la zona de Augas Férreas, en la capital lucense. Sin embargo, la jueza instructora tomó la decisión de enviarlo a la prisión de Bonxe por su presunta participación en los hechos.
Según el letrado de oficio que se hizo cargo de su defensa, "existe una justificación razonable del lugar en el que estaba" su cliente en el momento en el que se le imputan los hechos "y no existe ninguna prueba, de entrada, que lo descarte".
Por otra parte, precisó que Vidal Anido no fue enviado a prisión por un supuesto delito de agresión sexual en grado de tentativa. "Está en calidad de preso preventivo, porque según el auto de prisión existen indicios de que pudo haber cometido un delito de coacciones", explicó el letrado, quien también aclaró que "la pena máxima por ese delito es de tres años" de cárcel y la mínima "de seis meses".
El letrado recordó que "en estos momentos el proceso está en fase de instrucción" y "el juzgado tiene que evaluar las pruebas de cargo y las pruebas de descargo para averiguar cómo fueron los hechos". "Una vez que termine la fase de instrucción, será el momento en el que se planteará el correspondiente escrito de defensa", precisó, para sostenerlo "en el juicio" si finalmente llega a celebrarse y "no se archiva antes" la causa.
