La sede de Comisións Obreiras en Santiago amaneció este viernes con una pintada en su fachada en la que se podía leer la palabra 'vendidos' y que aparecía firmada por Ami, la Assembleia da Mocidade Independentista. El sindicato, en un comunicado, aseguró que seguirá trababando por una "salida justa a la crisis" y calificó el acto como unas "amenazas cobardes".
No es la primera vez que un local de CCOO es atacado, aunque en ninguno de ellos hubo que lamentar más daños que los materiales. No obstante, el sindicato pide "ponerle freno" a estas acciones, que en otras ocasiones estuvieron "a punto" de calcinar sedes como las de Porriño o Vigo. Asimismo, CCOO recuerda que la libertad sindical es "uno de los pilares" de la democracia y que hechos de este tipo son "totalmente incompatibles" con ella.
La palabra 'vendidos' probablemente hacía alusión a las negociaciones que tanto UGT como CCOO mantienen con el Gobierno y la patronal para alcanzar un gran pacto sociolaboral.
