La Xunta ha comunicado hoy a Aurelia Rey, una mujer de 85 años cuyo desahucio fue paralizado en dos ocasiones en febrero pasado tras la movilización ciudadana, que el piso de alquiler social adjudicado está ya a su disposición.
El conselleiro de Medio Ambiente, Territorio e Infraestructuras, Agustín Hernández, ha firmado hoy su adjudicación después de que el último documento necesario para su tramitación, el certificado de ingresos -requerido para determinar el precio del alquiler-, fuese presentado ayer en la jefatura provincial del Instituto gallego de Vivienda y Suelo.
La Xunta ha comunicado ya a Aurelia su adjudicación y le ha informado de que el contrato de alquiler está a su disposición en la jefatura provincial de ese organismo "donde deberá firmarlo como paso previo a recibir las llave de la vivienda".
Esta misma mañana fuentes de la asociación Stop Desahucios, que ha acompañado a la octogenaria durante todo el proceso, han indicado a Efe que espera recibir el contrato para abandonar su vivienda en el centro de A Coruña, cuyo plazo concluye hoy de acuerdo con el pacto con los propietarios.
La mujer está preparada para marcharse -sus pertenencias están ya empaquetadas- y lo hará en cuanto reciba las llaves y el contrato de su nuevo piso, según Stop Desahucios que ha alertado de que el inmueble de alquiler social, ubicado en el barrio de Eiris, no cuenta todavía con suministros básicos para su habitabilidad.
Su traslado a un piso de alquiler social de la Xunta fue la solución alcanzada tras el gran revuelo social en febrero pasado por la movilización ciudadana que logró paralizar por dos veces el desahucio de la octogenaria.
