Las referencias a la dignidad han marcado el homenaje a los 80 fallecidos en el acto que se ha celebrado este lunes junto a la curva de A Grandeira, en el barrio compostelano de Angrois, en el cuarto aniversario del accidente del Alvia.
Víctimas y familiares han vuelto este lunes al antiguo campo de la fiesta de esta zona de Santiago, donde el descarrilamiento de un convoy provocó 80 muertes y dejó heridas a 144 personas el 24 de julio de 2013, en la víspera del Día de Galicia.
Una vez más, la plataforma de afectados ha recordado a los que ya no están en un sentido acto que ha concluido en torno a las 20.40 horas, momento en el que se produjo el siniestro ferroviario más grave de la democracia española.
Previamente se ha celebrado una misa en la Colexiata de Sar y, por la mañana, una manifestación reivindicativa para reclamar "verdad, justicia y reparación" ha recorrido las calles compostelanas.
HOMENAJE. El homenaje más emotivo ha dado comienzo sobre las 19.00 horas en el puente de Angrois, sobre las vías de la línea que conecta Ourense con la capital gallega.
Ahí ha vuelto a estar presente la pancarta de la asociación, exigiendo una comisión de investigación para depurar responsabilidades políticas por lo sucedido.
Ya en la explanada sobre la que cayó uno de los vagones hace cuatro años, el acto se ha iniciado con el Imagine de John Lennon y las palabras del representante de los vecinos de Angrois, Anxo Puga, quien ha clamado por "que se sepa la verdad" y ha animado a las víctimas a "seguir" luchando por ello.
El escritos Juan Besada ha dedicado unas palabras también al "trabajo" de los afectados "por mantener la dignidad", y ha subrayado: "A los nuestros, se lo debemos".
A continuación, Carlos Vázquez Padín, responsable de Converxencia XXI cuya madre perdió la vida en el accidente, ha agradecido la "dignidad y grandeza" de los vecinos por lo hecho aquel día y también por los posteriores. Al dream team de la plataforma de víctimas, por su labor, le ha atribuido "valentía, inteligencia y resistencia" en su batalla contra el Estado. "Más pronto que tarde, triunfaremos y obtendremos verdad y justicia", ha augurado, antes de valorar que "toda Galicia le debe agradecimiento" a esta asociación por su empeño en que se depuren responsabilidades con el objetivo de que un siniestro como el del Alvia no vuelva a ocurrir.
Ya con la interpretación del Hallelujah de fondo, se ha procedido a la suelta de 81 globos rojos con forma de corazón —las víctimas contabilizan un muerto más que el juzgado—.
Estos globos han coloreado el cielo santiagués en una tarde de sol y nubes y ha sido en ese momento cuando varios niños, como cada año, han realizado la ofrenda floral de 82 rosas blancas —una más, por un niño que no llegó a nacer— en el cruceiro instaurado tras la tragedia, algo antes de que pasase el tren que hace cuatro años no llegó a la estación.
MANIFESTACIÓN. Por la mañana, miembros de la Plataforma de Víctimas del Alvia 04155 y representantes de las principales fuerzas políticas —a excepción del PP— se han manifestado en Santiago para "exigir verdad, justicia y reparación".
El recorrido comenzó a las 11.00 horas en la estación de tren, donde el presidente de la plataforma, Jesús Domínguez, ha celebrado que, gracias al trabajo de este colectivo, "cuatro años después tanto la Audiencia Provincial como el juez y la Unión Europea apoyan nuestra lucha, aunque creemos que si nos hubiéramos movilizado hubiera sido imposible". "En un día de recuerdo tenemos que venir aquí a exigir que se depuren responsabilidades, tanto las jurídicas como las políticas", ha señalado Domínguez, que ha recordado que "hay hechos muy graves, como que nos vendieron una línea diciendo que tenía los máximos sistemas de seguridad aunque no funcionaban".
"Las personas que presionaron para que el informe de la Unión Europea evidentemente no tienen la responsabilidad del homicidio involuntario de 80 personas, pero sí tienen una clara responsabilidad política y deben comparecer ante el Congreso y dar la cara", ha afirmado el presidente de la Plataforma.
De esta forma ha querido recordar las dos principales reivindicaciones de las víctimas: la instalación del sistema de seguridad ERTMS en todo el tramo Ourense-Santiago, "que habría evitado el accidente y cuatro años después sigue sin estar operativo", y la constitución de una comisión de investigación parlamentaria y una comisión técnica independiente, "como ha reclamado la Agencia Ferroviaria Europea". Aunque la creación de estas comisiones ha contado con la negativa del PP y el PSOE durante los últimos años, los socialistas han cambiado recientemente su postura y han formalizado la petición de una comisión de investigación en el Congreso, hecho que las víctimas han querido destacar.
Durante el recorrido hasta la Praza do Obradoiro, los manifestantes han exhibido pancartas con los rostros de los políticos que entienden como responsables, como el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo; la entonces ministra de Fomento, Ana Pastor, o su predecesor, el socialista José Blanco.
La manifestación ha transcurrido con tranquilidad mientras las víctimas recibían muestras de apoyo espontáneas de los transeúntes, que han aplaudido al paso de la marcha, que posteriormente llegaría al Obradoiro para leer un manifiesto por parte de otro integrante de la plataforma, Víctor Taibo. "Nos han engañado los diferentes gobiernos vendiendo una seguridad que no existía", ha asegurado, que centró sus críticas en "los señores del Partido Popular", a los que ha reclamado "que no nos engañen diciendo que hay un juicio en marcha", tras lo que ha recordado que las responsabilidad políticas y judiciales han de sustanciarse de forma independiente, ya que "hay separación de poderes".
Las víctimas estuvieron acompañadas en todo momento por los portavoces de las principales fuerzas de la oposición en el Parlamento gallego —Luís Villares, de En Marea; Xoaquín Fernández Leiceaga, del PSdeG, y Ana Pontón, del BNG—, así como por el alcalde de Santiago, Martiño Noriega, o el portavoz de la agrupación municipal de Ciudadanos, Javier Sánchez-Agustino.
