Familiares y víctimas del accidente ferroviario que causó 80 muertos y 147 heridos en Santiago de Compostela (noroeste de España), rendirán este jueves homenaje a las víctimas y exigirán "la verdad" de lo que ocurrió, al cumplirse el primer aniversario de la tragedia.
El 24 de julio de 2013 un tren que cubría la ruta Madrid - Ferrol (a 93 kilómetros de Santiago de Compostela) descarriló en el barrio de Angrois, a las afueras de la capital de la región de Galicia.
Según el informe de la Comisión de Investigación de Accidentes Ferroviarios(CIAF) la principal causa del siniestro fue el exceso de velocidad, del que se responsabiliza al maquinista del tren, Francisco José Garzón Amo, pero las investigaciones judiciales continúan.
Los familiares de las víctimas se manifestarán para exigir que se depuren responsabilidades por el siniestro y lamentan que únicamente señala como responsable al conductor de ese tren "que efectivamente se distrajo" con una llamada telefónica.
El actual juez instructor de la causa abierta por este accidente, Andrés Lago Louro, está revisando la investigación de su antecesor, Luis Aláez, quien siguió una línea que apuntaba a una causa múltiple como desencadenante, y no únicamente al despiste de una persona que atendió la llamada telefónica del interventor de a bordo, Antonio Martín Marugán.
El gobierno regional de Galicia también recordará este drama humano al entregar la Medalla de Oro de Galicia a los familiares de las víctimas, voluntarios y profesionales que colaboraron en el auxilio.
También se celebrará una misa funeral en la catedral de Santiago y a la misma hora de la tragedia se pondrán rosas blancas con los nombres de las víctimas en el lugar del suceso.
La valla en la que se estrelló el tren estaba hoy cubierta de flores, amuletos, conchas de vieira, peluches, cruces y mensajes con mensajes como Siempre estarás con nosotros Juanan, Nunca os olvidaremos.
