Los bomberos vieron el cuerpo del septuagenario en la bañera tras apagar el fuego

Un septuagenario, Tomás Milia ha sido hallado muerto esta madrugada en el interior de su domicilio, en Ourense, con aparentes signos de violencia, y un joven rumano, en la veintena, ha sido detenido en relación con el caso.

Los Bomberos localizaron el cuerpo ensangrentado alrededor de las cinco y media de la mañana en el interior de una bañera, al ir a apagar un incendio en este piso, situado en la céntrica calle Curros Enríquez de Ourense, y del que había alertado previamente un vecino del inmueble.

Según los primeros indicios, las llamas se iniciaron en el salón, donde se encontró un producto acelerante.

A raíz de estos hechos, la Policía detuvo poco después a un joven de unos veinte años, que permanece a estas horas en los calabozos de la comisaría de la Policía Nacional a la espera de pasar a disposición judicial.

El juez ha decretado secreto de sumario.

Las primeras investigaciones apuntan a que la víctima, un hombre muy conocido porque fue farmacéutico en el núcleo ourensano de Maceda y es hermano del alcalde de Carballeda de Avia, que se ha desplazado hasta la zona, pudo morir apuñalado antes de que se originara la lumbre, que habría comenzado en un armario del salón.

Los vecinos han contado a que Tomás Milia estaba casado con un hombre que estaría colaborando activamente en las pesquisas, aunque su relación sentimental se había resquebrajado.

Carla Martínez Álvarez se encontraba en el noveno piso con su madre cuando se despertó por un fuerte olor a humo, que luego supo que provenía del quinto, donde se halló el cuerpo sin vida de esta persona que, según han contado a EFE fuentes cercanas al caso, iba "vestido de mujer".

"Nos despertamos por el olor a humo", ha manifestado Carla Martínez, y "luego supimos que había estado por la noche aquí ese chico, el que está arrestado".

Ha añadido esta vecina que por lo que parece el detenido "cogió joyas de valor", se las llevó, "y plantó fuego a un armario de madera", presumiblemente para destruir pruebas, antes de "intentar huir en taxi".

Ella ha señalado que su sueño se vio interrumpido por la "cantidad de humo que había" y, ante este suceso, ha explicado esta mujer que la víctima "traía bastante gente a casa" y hubo quien lo avisó de que alguno "no tenía buena pinta", por lo que en algún momento "pensamos en consecuencias graves pero no tan graves".

Otra vecina de la misma planta, rebaja esta advertencia: "Él no era conflictivo", pero no opina de sus amistades.

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