El último parte médico facilitado por el Servicio Galego de Saúde (Sergas) confirma que los cinco ancianos ingresados por el brote de legionella de As Gándaras "evolucionan favorablemente", a pesar de que en algún caso a la presencia de la bacteria se suman otras patologías previas.
Las mismas fuentes del Sergas confirmaron a EFE que son seis los casos detectados hasta el momento, pero sólo cinco ancianos continúan ingresados en el HULA para recibir tratamiento contra la legionella, porque uno de ellos ya recibió el alta hospitalaria.
Por lo demás, otro anciano, de los cinco que continúan ingresados en el HULA, permanece todavía en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI), aunque según fuentes hospitalarias su estado también ha experimentado una mejoría, dentro de la gravedad.
Por otra parte, en la reunión de coordinación entre responsables de las consellerías de Traballo e Benestar y Sanidad, presidida por la delegada territorial de la Xunta de Galicia, Raquel Arias, se tomó la decisión "para tranquilidad absoluta de los residentes, del personal y de las familias", de continuar "con medidas preventivas adicionales" en la residencia de As Gándaras.
De modo que, a pesar de haber terminado ya las labores de desinfección en la residencia de mayores, se están instalando duchas de agua caliente provisionales.
Esas "medidas preventivas adicionales" se mantendrán hasta conocer el resultado de una "analítica definitiva que se realizará el día 28 de noviembre".
