Los diputados de Alternativa Galega de Esquerda han decidido hoy abandonar el pleno del Parlamento, después de que el presidente ocasional de la Cámara, Miguel Santalices, hubiese decidido expulsar a su compañero David Fernández Calviño.
El incidente se produjo cuando Fernández se encontraba en el hemiciclo para fijar su postura sobre una iniciativa del BNG para evitar desahucios.
El parlamentario comenzó su intervención señalando que hoy, martes de carnaval, había estado a punto de acudir a la Cámara vestido "de sobre" o de "corrupto", y lamentó que en fecha tan señalada, especialmente para la provincia de Ourense, por la que es diputado, se celebre un pleno.
El parlamentario subrayó que no pudo ir disfrazado "de sobre" porque el PP los había comprado todos, momento en el que Santalices le llamó al orden por primera vez. Luego, Fernández continuó su relato en modo irónico, en el que dijo que había hablado con el expresidente valenciano Francisco Camps para contratar los servicios de su sastre, momento en que fue apercibido por segunda vez.
El diputado se giró y señaló que estaba haciendo uso de su libertad de expresión, a lo que el presidente en funciones le dijo que libertad de expresión sí, "dentro de un orden".
A continuación, el parlamentario dijo que se había reunido con Bárcenas, también figuradamente, y que le había dado un sobre, que sacó de su bolsillo, y dijo que lo iba a dejar en el escaño del presidente gallego, Alberto Núñez Feijóo, momento en el que fue llamado al orden por tercera vez y fue expulsado.
En ese momento, el líder de Alternativa Galega de Esquerda, Xosé Manuel Beiras, pidió la palabra para expresar su protesta por la actitud del presidente y, al igual que el resto de compañeros de grupo, abandonó el hemiciclo. Beiras apuntó que si se sigue por ese camino se van a impedir incluso ejercer el humor en el Parlamento e indicó que los grupos están siendo requeridos para contribuir a que no haya alteraciones del orden por parte de los invitados.
A este respecto, dijo que supone que no se va a aplicar a los derechos de los diputados. "Si nos ponemos en plan represor y convertimos un ejercicio de humor en un día como hoy en un motivo de expulsión, me veré obligado a abandonar el pleno, porque me parece un abuso, señor Santalices, con toda la cordialidad, y no va en la línea" de llegar a acuerdos.
Ante las palabras de Santalices de que ha habido suficiente advertencia, el diputado de AGE recibió la solidaridad tanto del BNG como del PSOE.
Así, el portavoz del Bloque, Francisco Jorquera, dijo: "Ustedes se están extralimitando; hay que respetar el sentido del humor" y calificó de "extremadamente rigurosa y autoritaria" su decisión que, además, supuso tres llamadas al orden en muy poco tiempo, aunque "suficientemente espaciadas" para Santalices.
Por su parte, Abel Losada, del PSdeG, también lamentó que en un plazo de dos minutos Miguel Santalices hubiese hecho tres advertencias "prejuzgando" la intervención del diputado de AGE, a quien algún diputado del PP llegó a llamar "payaso", dijo, motivo por el cual le pidió al presidente ocasional que no sea tan riguroso con la oposición.
UN ''HOMENAJE'' AL CARNAVAL
Por su parte, el diputado expulsado subrayó a los periodistas que comenzó su intervención haciendo un "homenaje" al Carnaval pero "no insulté a nadie ni le falté al respeto", y subrayó que cuando fue expulsado ni siquiera estaba hablando, ya que se dirigía al escaño de Feijóo.
Por tanto, dijo no entender su expulsión. "No nos dejan hacer prácticamente nada aquí y no quieren que nos echemos unas risas de vez en cuando, creo que no le falté el respeto a nadie y ni una llamada al orden merecía desde mi punto de vista", agregó el parlamentario. Apuntó que algún diputado del PP sí llegó a insultarle, por lo que calificó de manera "totalitaria, neofascista si queremos, de ejercer el poder", porque a la oposición "no nos dejan expresarnos libremente".
El carnaval también estuvo presente en la intervención del diputado del BNG Cosme Pombo, quien, cuando defendía su iniciativa contra los desahucios, cantó en el hemiciclo dos coplas de una charanga de carnaval llamada KGB (Caixa Galicia Banco), subrayó.
