Mar Longueira: ''Nunca maltraté a mis hijos''

Mar Longueira, la madre de los dos mellizos de diez años asesinados el 21 de agosto de 2011, ha dicho esta tarde a la salida de la segunda sesión del juicio por esta causa ante la Audiencia Provincial de A Coruña: "Yo nunca maltraté a mis hijos, nunca".

 
En declaraciones a Efe, ha indicado que el testimonio hoy de su hijo mayor, David Lista, de 19 años y fruto de una relación anterior a la que mantuvo Mar con Pablo, el padre biológico de las víctimas -los niños Adrián y Alejandro Bergantiños- es la "prueba" más fidedigna de que no hubo violencia contra estos dos menores.
 
"Lo dijo él, David", apuntó Mar, una vez que su vástago rechazó esta acusación, y así mostró su confianza en que al final todo se aclare después de los testimonios aportados este martes por su propia madre, Esther Souza, de 63 años, su primogénito, la orientadora laboral y los tutores del centro en el que estaban escolarizados los pequeños, y una trabajadora social del Ayuntamiento de A Coruña. "No hay ninguna prueba de que hubiera maltrato", manifestó Mar Longueira.

LA CANGURO ASEGURA QUE ESTRADA ''DESPOTRICABA'' DE LOS MENORES
También prestó esta mañana declaración una canguro de los dos niños, Laura Luz, que incurrió en contradicciones entre su testimonio ante la policía, el juzgado de instrucción, y el de ahora en la vista oral, y así fueron reseñadas por los abogados.
 
Laura Luz contó que Javier Estrada, el autor confeso de estas muertes y pareja de Mar cuando sucedieron los hechos, "despotricaba siempre" de Adrián y de Alejandro, "era como el plato del día, siempre estaba hablando mal de ellos", y también que Mar estaba "muy enamorada de él, eso tengo que decirlo".
 
Además sostuvo que una vez que ambos, Mar y Javier, se fueron a una casa rural dejaron a Alejandro con ella seis días "y no lo llamaron por teléfono" ni le hicieron un regalo, pese a que en aquel entonces se celebraba la Navidad. Asimismo, Laura Luz comentó que ella a Mar estaba "dispuesta" a ayudarla, pero si seguía "con ese individuo", Javier, del que dijo que se le puso "la piel de gallina" cuando vio su informe psiquiátrico, pues "así no". "Ella (Mar) me llamaba cuando le interesaba", relató Laura Luz, y añadió que llegó a decirle a la abuela Esther "aquí va a pasar una desgracia", aunque a preguntas de los abogados y ante sus versiones, no supo aclarar si esto lo decía ella o la abuela. "Lo decíamos las dos", concluyó finalmente, y algún letrado le contestó a Laura que eran suficientes "sus tres versiones" distintas.
 
A preguntas de Efe sobre este aspecto, Mar Longueira ha indicado que "de las contradicciones suyas... yo no quiero ni hablar de eso, no me interesa".
 
La abuela de Adrián, un niño que tenía una minusvalía psíquica del 52%, y de Alejandro, afirmó hoy en el juicio al ser preguntada por Laura Luz: "no se quién es esa señora, no es mi amiga, la conocí en la calle..." y, al momento, agregó, "no la conozco de nada". Instantes más tarde, indicó: "vino a mi casa a ponerse como una loca, es una loca, vino a ponerme enferma, más de lo que yo ya estaba", en alusión a una visita de Laura Luz que se produciría después del crimen de los niños.
 
David Lista en referencia a este mismo episodio también destacó en su testimonio de hoy esa palabra, "loca".
 
Javier Estrada está acusado de matar a los menores golpeándolos con una barra metálica, y se enfrenta a una petición de pena de 50 años de prisión por dos asesinatos y un delito de malos tratos psíquicos y físicos contra los menores.
 
Para la madre se piden 11 años por otro delito de maltrato sobre sus hijos. El juicio está previsto que se prolongue durante varios días con la declaración de los acusados, peritos y testigos.

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