El juzgado de instrucción 3 de Cangas ha decretado prisión provisional para Marino Giménez, hijo del patriarca de los Morones, Olegario Giménez, mientras que su pareja, también detenida este martes, ha quedado libre con cargos y comparecencias judiciales como medida cautelar, informaron fuentes del TSXG.
Marino Giménez está pendiente de juicio por el intento de robo de cocaína a unos traficantes con la colaboración de un agente de la Guardia Civil. Su arresto y el de su pareja se produjo el martes en una segunda fase de la denominada operación Vida, que investiga supuestas extorsiones a vendedores ambulantes y otros delitos, como organización criminal, contra la Seguridad Social, tráfico de drogas, tenencia ilícita de armas y blanqueo de capitales.
Antes ya fueron enviados a prisión el patriarca de los morones, Olegario Giménez, y sus hijos Sinaí, Saúl y Juan Paulo. Los restantes miembros del clan familiar y allegados, hasta once, quedaron en libertad provisional con la obligación de comparecer ante la justicia los días 1 y 15 de cada mes.
El conflicto entre los denominados clanes gitanos de los "morones" y los "zamoranos", sobre el cual se iniciaron las indagaciones, ha tenido varios episodios violentos, con reyertas en Cangas y en la céntrica calle Gran Vía de Vigo.
El episodio más grave se produjo cuando un grupo de "zamoranos" fue tiroteado al regresar a O Porriño tras participar en el mercadillo de Coia, en Vigo, sin que por el momento las fuerzas de seguridad hayan arrestado al autor o autores del asalto.
El enfrentamiento entre estos dos clanes propició, asimismo, el exilio de un centenar de familias "zamoranas" a Castilla por desavenencias sobre la feria de la localidad gallega de Tui, en la frontera hispano-portuguesa.