El alcalde de Lugo, José López Orozco, espera que la multa de 30.050 euros que el gobierno local ha decidido aplicar a la empresa Urbaser por el incumplimiento de los servicios mínimos durante los 59 días de huelga en el servicio de limpieza y recogida de basura en la ciudad sirva para "callar a algunas bocas".
En declaraciones a EFE, el alcalde afirmó que esa sanción, la cantidad "máxima que permite la ley", debería servir al menos para que se retracten aquellos que durante la huelga en el servicio de limpieza acusaron al gobierno local "de estar a favor de la empresa".
De hecho, López Orozco reiteró que el gobierno local sólo está "para defender los intereses generales de todos los lucenses", pero no para velar por la cuenta de resultados de ninguna empresa que preste servicios para la Administración municipal.
En cuanto a la citada sanción, dijo que "los funcionarios municipales hicieron el informe que consideraron oportuno" y, a partir de ahí, el gobierno local entendió que debía aplicarle a la empresa concesionaria "la máxima sanción que permitía la ley" por el incumplimiento de los servicios mínimos".
"Creo que actuamos conforme a derecho y, si la empresa recurre, los tribunales resolverán".
