El Concello de A Pastoriza, que gobiernan en coalición socialistas y nacionalistas, ha tomado la decisión de ampliar el plazo de alegaciones contra las minas de cuarzo que la empresa Erimsa quiere implantar en ese municipio de la comarca lucense de Terra Chá, para que los afectados tengan tiempo suficiente para presentar sus reclamaciones.
Cuando la empresa Erimsa presentó en los municipios de Cospeito y A Pastoriza la solicitud de licencia municipal para iniciar su actividad en dos de las tres concesiones mineras que tiene en la Terra Chá, el SLG les solicitó a los gobiernos locales de ambos municipios que ampliasen el plazo de alegaciones, para que todos los afectados pudiesen presentar reclamaciones.
En el Concello de Cospeito, el gobierno local del Partido Popular tomó la decisión de no ampliar ese plazo, que estuvo abierto durante veinte días, pero la Comisión contra as Minas da Terra Chá, una asociación que agrupa a todos los colectivos sociales contrarios a la implantación de las canteras, presentó más de 500 alegaciones.
Sin embargo, el gobierno local de A Pastoriza, después de que este martes expirase el plazo inicial de veinte días, optó por ampliarlo durante otros diez a partir de este miércoles, según informó a EFE la teniente alcalde, la nacionalista Elba Carrera.
Según Elba Carrera, el gobierno municipal de A Pastoriza tomó esta decisión porque "es una época malísima, con mucha gente de vacaciones y otra mucha que no se enteró de que estaba abierto el plazo para presentar alegaciones a las minas".
La teniente alcalde reconoció que la posible implantación de las minas de Erimsa "afectaría a muchas fincas de labradío, utilizadas por las explotaciones agroganaderas de la zona", por lo que "muchos vecinos no están de acuerdo con esa actuación".
De momento, en el municipio de A Pastoriza, uno de los de mayor producción láctea de Galicia, han sido presentadas más de 150 alegaciones contra la implantación de las minas.
