La portavoz del Partido Popular de Galicia, Paula Prado, ha señalado hoy que Xosé Manuel Beiras, referente de Alternativa Galega de Esquerda (AGE), "pasará a la historia por un puñetazo, por un zapatazo, y por nada más".
El político nacionalista se dirigió este miércoles al escaño del presidente gallego mientras éste intervenía en la sesión de control sobre su relación con Marcial Dorado, en prisión por narcotráfico, y dio un golpe al tiempo que le pedía "decencia" al presidente de la Xunta.
Prado ha indicado hoy, en conferencia de prensa, que la "única garantía" para poner fin a los "puñetazos" de este diputado es pedirle que abandone la cámara de representación de todos los gallegos, petición de dimisión que se produce un día después de que Alberto Núñez Feijóo censurase la actitud de "puños y manotazos" de este parlamentario.
La portavoz del PPdeG ha recalcado que Xosé Manuel Beiras "pretende romper el sistema desde dentro, y nosotros pensamos que debería participar en el sistema desde fuera" pese a que tanto él como el líder de los socialistas gallegos, Pachi Vázquez, sean un "filón" para el PPdeG.
Prado ha abundando en que "aún siendo así, no vamos a poner por encima de los intereses de los gallegos intereses partidistas, y no podemos dar amparo a determinadas prácticas. Ha llegado el momento de que el señor Beiras hable para disculparse por su actitud y tome una decisión digna tras lo ocurrido esta semana en el Parlamento".
Así, ha reivindicado que la que ha dado en llamar "política del puñetazo", en un legislativo "no tiene cabida y menos en una sociedad pacífica como es la gallega". En este sentido, ha avanzado que se analizará esta conducta, "pero lo que está claro es que habrá un antes y un después en nuestras relaciones con AGE tras su intento de amedrentamiento físico al presidente de la Xunta de Galicia".
