La magistrada Pilar de Lara ha cesado este jueves como titular del juzgado de instrucción número 1 de Lugo, en ejecución de la sanción de siete meses y un día de suspensión de funciones que le impuso la Comisión Disciplinaria del Consejo General del Poder Judicial por una falta muy grave de desatención en el ejercicio de las competencias judiciales.
La ejecución se ha hecho efectiva después de que el Tribunal Supremo desestimara el pasado viernes la petición de suspensión cautelar de la sanción planteada por la magistrada, según informa el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia.
La sala declinó el recurso de la jueza al argumentar que, "ante los hechos declarados probados en vía administrativa y que han determinado la imposición de la sanción, la ponderación de intereses debe inclinarse en favor del interés general del buen funcionamiento de la administración de justicia, que requiere que se cumplan las sanciones impuestas por conductas gravemente contrarias al mismo".
En los últimos días, la magistrada redujo, en palabras de su abogado, una "cuarta parte" las "80 o 90" causas sobre las que trabaja para "dejar las investigaciones" prácticamente finalizadas "con el fin de evitar más perjuicios a este tipo de procesos".
Agustín Azparren señaló que se trata de "causas de especial dedicación que llevan mucho más tiempo" ya que, entre otras, se encuentra la operación Carioca sobre redes de prostitución, la Pokemon o el caso Garañón.
Muchos de los investigados en los últimos años por De Lara, y que sufrieron las dilaciones en sus instrucciones, pidieron en los últimos días al Poder Judicial que ejecutase cuanto antes su sanción, entre ellos el exlíder de los socialistas gallegos José Ramón Gómez Besteiro.