La dirección del hospital Povisa de Vigo ha planteado hoy al comité de empresa el despido de 13 trabajadores del área de hospitalización y la modificación de turnos y horarios de otros 68 por el coste del reintegro de la parte proporcional de la jornada que redujo unilateralmente a 101 empleados.
El Tribunal Superior de Justicia de Galicia desestimó recientemente un recurso de Povisa al fallo del Juzgado de lo Social 3 de Vigo que declaró nula dicha modificación de jornada para este centenar de trabajadores, que pasó de 40 a 35 horas semanales, a partir de enero de 2013.
La secretaria del comité de empresa, Ruth Vallejo, ha detallado en rueda de prensa que entre los trece despedidos figuran enfermeros, auxiliares y celadores que participaron "activamente" en las movilizaciones por la negociación del convenio colectivo, por lo que ha intuido "represalias" por parte de la dirección.
Además, ha recordado que los contratos de estos trabajadores están ligados al convenio con el Servicio Gallego de Salud (Sergas), cuya ampliación por diez años y por un montante de 75 millones de euros acordaron las partes a finales de 2013, lo que resulta aún más "chocante" para el comité de empresa.
Vallejo ha resaltado que como la empresa no puede, por mandato judicial, reducir la jornada laboral, ahora opta por modificarle los turnos y los horarios a 68 empleados, que es la cifra resultante de restar a los 101 inicialmente afectados por las medidas de ajuste los 33 que alcanzaron acuerdos individuales con la empresa.
Estos 68 empleados trabajan en las áreas de rehabilitación, policlínica, radioterapia, medicina nuclear y fisioterapia.
El comité de empresa de Povisa ha recordado que casi el 50% de su plantilla, que totaliza 1.350 empleados y atiende a 143.000 pacientes, el 75% de los cuales a través del concierto con el Sergas, redujo voluntariamente su jornada en un 12,5% en abril de 2012 "atemorizada" por la última reforma laboral.
"Falta personal", ha asegurado Vallejo, quien ha añadido que en determinados tramos horarios "no damos abasto".
Otro miembro del comité de Povisa, Francisco Balboa, ha incidido en que la clínica solo cuenta con dos celadores de urgencia por las noches, algo que "no sucede en ningún hospital del mundo".
Los representantes sindicales han advertido de que todas estas medidas de ajuste inciden directamente en la calidad asistencial prestada en el centro y convierte a su población de referencia en "pacientes de tercera", mientras la empresa, por otra parte, está teniendo "más beneficios que nunca".
Han denunciado también la nula información recibida por parte de la dirección y del Sergas sobre la renovación del concierto y que las negociaciones del convenio sigan "en punto muerto" a expensas de que el TSJG dicte sentencia sobre la ultraactividad del mismo, y han exigido que la Xunta tome cartas en el asunto.
