Las acusaciones por los supuestos delitos de extorsión, coacciones, amenazas, tráfico de drogas, blanqueo de capitales, tenencia ilícita de armas, fraude a la Seguridad Social y pertenencia a organización criminal que puso este jueves sobre la mesa la Fiscalía de Pontevedra convencieron al titular del juzgado de instrucción 3 de Cangas. En base a ellas, el magistrado decretó el inmediato ingreso en prisión de Sinaí Giménez y de otros dos miembros de la cúpula del clan de los morones: sus hermanos Saúl y Juan Paulo. Olegario Giménez, padre de Sinaí, continúa hospitalizado tras sufrir una crisis nerviosa el martes, cuando fue detenido, mientras que la madre y el resto de presuntos colaboradores del 'príncipe gitano' fueron puestos en libertad con cargos.
Las autoridades judiciales les consideran responsables de un entramado criminal dedicado a la extorsión de vendedores ambulantes de toda Galicia a través de un 'impuesto revolucionario' de entre 100 y 150 euros al mes. Según los investigadores, los procesados entretejieron un sistema que les permitía saltarse las ordenanzas municipales y situarse como intermediarios entre los concellos y los vendedores ambulantes, de tal suerte que Los Morones tenían una licencia para todo el mercadillo y 'subcontrataban' los puestos a otros feriantes. Para asegurarse los cobros, además, empleaban la coacción, las amenazas e incluso la agresión física, según la Fiscalía.
Paralelamente, Los Morones disponían de un entramado de sociedades 'tapadera' para dar una apariencia de legalidad a los ingentes beneficios que obtenían de las citadas actividades, que realizaban sin dar cuenta a los municipios (a través del pago de las tasas) ni a la Seguridad Social, según los investigadores.
A prisión Sinaí Giménez y dos de sus hermanos
Ingresan en el penal de A Lama de forma incondicional y sin fianza tras declarar en los juzgados ► Se les acusa de coaccionar a ambulantes para que les pagasen entre 100 y 150 euros al mes