Vilagarcía de Arousa se mojó de lo lindo en la Festa do Auga más multitudinaria que recuerdan sus participantes.
El hecho de que este año coincidiera en sábado hizo que la afluencia fuera masiva incluso desde el día anterior.
Miles de personas llenaron las calles de la localidad ciudad al grito de "Aquí no llega" para disfrutar de un evento que cada año tiene más fama no solo en Galicia, sino también en el resto de España.
La salida de San Roque, patrón de las fiestas de Vilagarcía, se adelantó unos minutos y estuvo vigilada por un importante dispositivo de seguridad para evitar que la multitud mojase la imagen.
Al ritmo del pasodoble "Triunfo", interpretado por la Banda de Música Municipal, vilagarcianos y visitantes, incluido el alcalde Tomás Fole, bailaron acompañando al santo.
Una vez en la capilla de San Roque, la encargada de dar el pregón fue la actriz y presentadora Nieves Rodríguez, que hizo un repaso sobre la estrecha relación entre Galicia y el agua y su reflejo en la literatura, citando autores como Otero Pedrayo.
Fue al terminar el pregón cuando el aluvión de gente allí congregada estalló en júbilo y desde los balcones ubicados en las zonas húmedas de Vilagarcía comenzaron a salir litros y litros de agua.
Abajo, grupos de amigos y familias enteras pedían más y más líquido ataviados de las formas más diversas.
Así, había disfraces de cocodrilos, elegantes camisas floreadas y las típicas camisetas con lemas que hacían referencia a temas de actualidad nacional y local.
La campaña "Caca, culo, plis", puesta en marcha por el Concello para acabar con las heces de perro en las calles, fue una de las grandes protagonistas de la fiesta.
Los hosteleros y empresarios también pusieron de su parte para amenizar la fiesta.
Discotecas móviles, barras con música y hasta una caravana del orgullo gay fueron algunas de las iniciativa que se pudieron disfrutar en una fiesta que a las tres de la tarde aún daba sus últimos coletazos.
La nota negativa de la jornada la pusieron las numerosas incidencias registradas, sobre todo de noche y en la zona de la playa, donde miles de jóvenes se dieron cita en un macrobotellón improvisado.
Fue en esa zona donde se produjo el incendio en cuatro palmeras y un apuñalamiento en una cafetería.
Además, también ardió un coche aparcado en la calle Pablo Picasso
A primera hora de la mañana, las ambulancias de Protección Civil llevaban un total de treinta servicios, de los cuales la mayoría por cortes, peleas e intoxicaciones etílicas.
La anécdota de la jornada fue un "rescate" de una tarjeta de teléfono móvil que se le cayó a su propietaria, de quince años, dentro de una alcantarilla de madrugada y que recuperaron agentes de Protección Civil.
Vilagarcía se moja un año más
