La periodista y presentadora Paula Vázquez, la actriz Ana Turpin, la cantante Karina y la artesana Consuelo Babiano han recibido este miércoles el Premio Nacional de la Mujer Rural 2018 por su profesionalidad como mujeres trabajadoras y han aprovechado para animar a la lucha por la igualdad.
Antes de la entrega del galardón, que concede anualmente la Federación de la Mujer Rural, Paula Vázquez ha sostenido que su profesión es un ejemplo de que las mujeres suelen tener un "papel secundario". Además, para ellas es "muy difícil" tener cabida en la franja de mayor audiencia, aunque ha animado a las profesionales a que sigan luchando ya que cuando hace 25 años ella era azafata del Un, dos, tres tampoco era "nada fácil" ser presentadora, pero ahí estaba Mayra Gómez Kemp.
La actriz Ana Turpin que ha participado en series como Amar en tiempos revueltos ha animado a no abandonar la lucha por la igualdad porque aunque se han logrado cambiar cosas todavía es necesaria una mayor toma de conciencia y voluntad porque "las libertades son muy frágiles y si no se cuidan se pierden", ha sentenciado.
Asimismo se ha referido a la importancia de dar "toques de atención" a las instituciones para que sigan ayudando, promoviendo y cuidando la base rural que, en su opinión, es "fundamental" para crecer y avanzar en una "nueva ruralidad".
En la misma línea, la cantante Karina ha asegurado que las mujeres han avanzado mucho en las últimas décadas pero todavía tienen muchos retos por delante, entre otros acceder a más puestos de responsabilidad ya que, a su juicio, son muy polifacéticas y esto facilitaría las cosas.
También ha recordado que ella como mujer trabajadora se ha topado a lo largo de su carrera profesional con importantes dificultades, en especial, en los años 60 y 70 cuando ella era una mujer joven y "muy mona" motivo por el que según ha sostenido "siempre iba a acompañada".
La empresaria rural Consuelo Babiano, que trabaja en el negocio de la miel, ha insistido en la importancia de hacer crecer el campo porque, en su opinión, todavía tiene muchas facetas por explotar y a diferencia del asfalto es "el lugar que da de comer a toda la ciudadanía".
