Los ganaderos congregados este sábado en la capital lucense (que iniciaron el jueves una protesta para reclamar precios justos para los productores de leche) decidieron mantener sus tractores en Lugo "de forma indefinida". Los asistentes a la movilización afirman que no se moverán hasta conseguir un compromiso "por escrito" de las administraciones y exigen que se atiendan sus demandas.
Lejos de decaer, la propuesta fue ganando fuerza a lo largo de la jornada y, a las doce de la noche, unos 300 tractores rodeaban la Ronda da Muralla con la intención de quedarse.
Tras dos días de incertidumbre, y sin una línea de actuación clara, los ganaderos recondujeron este sábado la situación y decidieron crear una organización con un representante de cada concello. De este modo, más de una treintena de personas se reunieron durante tres horas para intercambiar opiniones y fijar objetivos. Finalizado el encuentro, la propuesta fue sometida a la asamblea.
En la madrugada del sábado, la movilización pareció vivir un cisma, ya que un grupo de ganaderos se marcharon, convencidos por las explicaciones que la conselleira do Medio Rural, Rosa Quintana, ofreció a una representación de los concentrados en una larga reunión celebrada en la tarde del viernes.
Pero en la mañana de este sábado, la protesta se reactivó con fuerza, e incluso volvieron muchos de los que habían abandonado la concentración en la Ronda da Muralla. La tractorada se inició a mediodía del jueves, con la idea de mantenerla hasta primera hora de la tarde, pero ahora se prolonga. Y la próxima semana, Santiago.
