La Fiscalía filipina solicita la apertura de juicio por la muerte del gallego Diego Bello

Tres policías están acusados de asesinato y de falsificación de pruebas
Diego Bello. EP
photo_camera Diego Bello. EP

La Fiscalía de Filipinas ha emitido un auto de apertura de juicio contra los tres policías que supuestamente acabaron con la vida del joven coruñés Diego Bello en enero de 2020 en la isla de Siargao.

La Fiscalía indica en el escrito que el capitán que lideraba el operativo policial y otros dos agentes están acusados de asesinato y de falsificación de pruebas.

Además, explica que los policías investigados se ratificaron en su atestado, en el que sostenían que el surfista de 32 años llevaba una pistola y que lo mataron en defensa propia.

La Policía de Siargao asegura que llevaba tres meses haciendo seguimiento a Diego, a quien señalaron como "narcotraficante de alto valor", y que su muerte se produjo en una operación antidroga. Según su relato, Diego supuestamente vendió droga a un agente encubierto y al darse cuenta de su error, disparó.

Sin embargo, el departamento de Justicia de Manila ve indicios "abrumadores" para señalar como autores de un delito de asesinato y otro de falsificación de pruebas a los tres policías. 

En cuanto al delito de asesinato, la Fiscalía desmonta la teoría de la defensa propia basándose, por ejemplo, en la cantidad de disparos que recibió Diego Bello —uno de ellos a bocajarro—. Señalan también que el fuego cruzado narrado por los acusados, nunca ocurrió, puesto que el joven coruñés "estaba desarmado en ese momento". 

En esta línea, apuntan a que los policías se sirvieron de una "clara superioridad" respecto de la víctima e indican además, que hay pruebas que hablan de una "evidente premeditación" en el asesinato. Así, explican que los acusados monitorizaron, el día anterior a los hechos, los movimientos de Diego Bello, lo que redunda en la desestimación de la alegación de defensa propia. 

En el documento se habla hasta de "conspiración" y, en cuanto a la falsificación de pruebas, acusan a los implicados de colocar, "maliciosamente y a sabiendas", la pistola que supuestamente había utilizado Bello para atacarlos. 

La plataforma Justicia para Diego celebra la apertura de juicio contra los agentes como "un paso más" y confía en que "se haga justicia".