La Unión Europea ha aceptado las repetidas 'sugerencias' de Estados Unidos para imponer nuevas sanciones a Irán. Las principales atañen al Banco Comercial Melli, que verá sus actividades paralizadas.
Melli es la principal institución financiera del país y tiene sus principales núcleos de acción en territorio europeo en Hamburgo, Londres y París.
Otras sanciones serán a título personal y recaerán sobre una treintena de personas acusadas de ''vínculos con el programa armamentístico y nuclear de Irán''. Eso sí, ningún dirigente político ha sido tocado por las sanciones debido a motivos diplomáticos. ''Queremos mantener abiertas las vías de diálogo”, afirma uno de los responsables de la redacción de las sanciones.
Palo y zanahoria... de madera
Bush ve así como su reciente gira por Europa consiguió uno de sus principales objetivos, que no haya disidencias entre sus principales aliados en la sensible 'cuestión iraní'. Europa, mientras tanto, prosigue su estrategia de sanciones -ésta es la cuarta ronda- contra las intenciones de Irán de enriquecer uranio.
Eso sí, insiste en mantener abierto el diálogo y la cooperación en los terrenos políticos, económicos y comerciales, sin saber muy bien cual puede ser la validez de ese incentivo que parece no llevar a ninguna parte.
La aplicación de sanciones se había retrasado a la espera de Javier Solana, jefe de la diplomacia de la UE, regresara de su viaje después de ofrecer un amplio paquete de medidas encaminadas a aumentar la cooperación.
Sin embargo, esa estrategia es torpedeada desde el propio interior de la UE que ni siquiera espera a la negativa de Irán. Es lo que afirma la eurodiputada alemana Angelika Beerk, presidenta de la delegación UE-Irán del Parlamento Europeo.
Irán, a lo suyo
Irán mientras tanto sigue con su tira y afloja, buscando la ganancia en el río revuelto. Si la diplomacia europea y norteamericana baja la guardia, aprovecharemos para seguir avanzado con el progama nuclear. Si hay sanciones, seguimos con la excusa de la autodefensa.
El portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores iraní, Mohammad Ali Hossein, asegura que las sanciones europeas “sólo reforzarán la voluntad del pueblo y del gobierno de defender su soberanía”.
UE-Irán: el palo y la zanahoria... de madera
