Myanmar vive unas elecciones entre el desinterés y la tensión fronteriza

La jornada electoral en Myanmar (antigua Birmania) estuvo marcada este domingo por el desinterés de la mayoría de los birmanos que acudieron a depositar su voto. El escrutinio de las papeletas se efectúa de forma manual y con un procedimiento que no ha sido desvelado por el régimen militar que gobierna el país, así como tampoco cuándo tiene previsto anunciar el resultado oficial de las votaciones. Unos 27,3 millones de birmanos estaban convocados a elegir entre 3.000 candidatos de 37 formaciones los 1.163 diputados del Parlamento bicameral nacional y de las asambleas legislativas de los estados y regiones.

La jornada electoral se vivió con tensión en la frontera con Tailandia después de que un comando de una guerrilla étnica ocupara un puesto de la Policía birmana en Myawady, en la orilla del río Moi que separa ambos países.

Unos 150.000 birmanos viven en el lado tailandés de la frontera en campamentos de refugiados.

Una treintena de guerrilleros del Ejército Budista para la Democracia Karen (EBDK), capitaneados por Mayor Saw Htee, se hicieron sin un disparo con el control de la posición situada debajo del puente, a resguardo del sol, que comunica ambos países. Varios birmanos cruzaron el río por temor a que comenzasen los disparos. "Lo hacen para demostrar su rechazo a las elecciones", explicó un hombre de la etnia karen que, al lado de varios soldados tailandeses, observaba a los guerrilleros desde el mercado Moi, en la población fronteriza de Mae Sot, a poco más de un centenar de metros de distancia.

La tensión volvió a la normalidad con la presencia de los guerrilleros relajados a la sombra y varios policías birmanos sentados a unos metros de distancia y sin signos de hostilidad, al otro lado de la empalizada de sacos de arena del puesto.

Los votantes del país del sureste asiático acudieron a las urnas por primera vez en 20 años con la líder opositora, Aung San Suu Kyi, en cautividad. Con los comicios, el régimen militar birmano formaliza un proceso que culminará con la constitución de un gobierno de ex generales acólitos.

Los comicios han suscitado reacciones desde los más diversos puntos. Así, el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, aseguró en la India, donde se encuentra de visita, que las elecciones que se celebran en Birmania serán "cualquier cosa menos libres y limpias". En un discurso ante un grupo de estudiantes en la ciudad financiera de Bombay, Obama criticó que el pueblo birmano se vea privado de su "derecho" a decidir su destino. De su lado, el ministro británico de Asuntos Exteriores, William Hague, condenó las elecciones "manchadas" celebradas en Myanmar, por considerar que ese proceso electoral no representa "el progreso" al no ser "libre, justo o inclusivo".