Puente de dólares para Obama y Hillary

Hillary y Obama lideran las recaudaciones electorales
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Clinton y Obama llegan a las primarias empatados con 100 millones de dólares en donaciones electorales. Todo un récord, pues es la primera vez que aspirantes a obtener la candidatura de su partido a las elecciones presidenciales llegan a esa cifra antes de llegar a los ''caucus de Iowa'' que comienzan el jueves.

La campaña de Clinton confirmó oficialmente la cifra aunque aclaró que no incluye los 10 millones de dólares que la ex primera dama transfirió de su cuenta de fondos electorales como senadora por Nueva York.

Obama también llegó a la 'cifra mágica' según dijeron algunos de sus asesores aunque su organización no lo confirmó oficialmente todavía. Ninguno de los dos quiso divulgar su volumen de gasto o el dinero que les queda en sus arcas.

El resto de los políticos que quieren ser presidentes de Estados Unidos, tanto del lado republicano como del demócrata, no han hecho públicos los datos de recaudación aunque deberán presentar las cuentas de la última parte del año a la Comisión Federal de Elecciones el 31 de enero.

Tradicionalmente, los fondos recaudados actúan como un importante barómetro de la carrera presidencial y todos los candidatos tienen la obligación de declararlo cada trimestre. Hasta el momento, Hillary Clinton lideraba esta lista pero el esprint final de Obama en las encuestas parece haberse contagiado a su recaudación. En el tercer trimestre, Clinton había recaudado 27 millones, 8 más que el senador de Illinois, siendo la primera candidata en liza en llegar a los 80 millones.
 
El fenómeno Paul también se cotiza
En el lado republicano la sorpresa en los últimos tres meses ha sido el éxito del congresista Ron Paul, que recibió 20 millones de dólares en donaciones, principalmente por internet, según el diario "The Washington Post".

Paul está muy atrás en las encuestas de intención de voto, pero sus posiciones a favor de la retirada inmediata de Irak, las libertades civiles, la vuelta al patrón oro y de reducir la burocracia gubernamental y la injerencia del gobierno en la vida de los ciudadanos le han ganado el apoyo ferviente de un grupo minoritario de electores dentro de su partido.

Con esta gesta de financiación no correspondida en las encuestas de intención de voto, Ron Paul ha rubricado su llamativa tendencia al alza. Esto le permitió empezar a emitir los primeros anuncios de televisión, en los que que llama la atención la combinación de ortodoxia republicana con críticas frontales a la Administración Bush.