Tres años de cárcel para el narco que tiró la cocaína por la ventana al ser detenido en Pontevedra
El 29 de mayo de 2023, el centro de la ciudad de Pontevedra fue escenario de una gran operación policial con varios frentes abiertos. Por una parte, se investigaba a una organización criminal dedicada a los robos violentos, en unas pesquisas llevadas a cabo por la Unidad Orgánica de Policía Judicial de la Comandancia de la Guardia Civil de Ourense. Por otra, en la Boa Vila se seguía la pista de algunas personas relacionadas con la venta de cocaína, en este caso a cargo de la Udyco de la Comisaría Provincial y del Grupo SAI de la Policía Local. La confluencia de datos provocó una acción conjunta que tuvo su fase de explotación ese día, con detenciones y registros en la calle Cruz Gallástegui y en Joaquín Costa.
Precisamente en este último enclave, en una vivienda, residían las dos personas que se sentaron este martes en el banquillo de los acusados de la Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Pontevedra. Un hombre y una mujer, acusados de delitos contra la Salud Pública. Todo ello por arrojar por la ventana gran cantidad de cocaína justo en el momento en el que se percataron de la entrada de los agentes de los tres cuerpos policiales mencionados en el domicilio. La droga fue recuperada.
En el acto del juicio, lo ocurrido se resolvió por la vía rápida. En primer lugar, el varón asumió toda la responsabilidad sobre la sustancia estupefaciente intervenida, lo que sirvió para que el fiscal dejase fuera de la causa a su compañera, que resultó absuelta.
En cuanto a su responsabilidad, el Ministerio Público pedía para él una pena de cuatro años y medio de prisión que, en virtud del pacto, rebajó a tres años. No le eximió del pago de una importante multa que, si no satisface, se convertirá en 100 días más entre rejas.
En cuanto a la droga que lanzó por la ventana y que fue intervenida, alcanzó un peso aproximado de 600 gramos, todo ello con una pureza de un 75 por ciento. La lanzó en tres envoltorios diferentes, uno con 325 gramos, otro con 248 y otro con doce gramos. También se halló una báscula de precisión y otros útiles relacionados con la actividad investigada.
En los últimos años, y muy especialmente después de la pandemia de la covid-19, las organizaciones criminales de origen dominicano han ido ganando terreno en las principales ciudades de España, también en las gallegas, en el submundo de la venta de cocaína. Lo han hecho mediante el control de las zonas de ocio que, como se sabe, son el gran 'caladero' de clientes para quienes consumen esta droga.
Los grupos originarios del país caribeño, que llevaban años operando en Estados Unidos en este mismo perfil, han dado el salto de forma definitiva a España, tal y como ha quedado acreditado a través de numerosas acciones policiales desarrolladas en los últimos tiempos.
Estas redes han aprovechado la debilidad de otros grupos autóctonos muy perseguidos por las autoridades para hacerse fuertes y empezar a dominar el negocio.