Florencio A.C., el hombre que está acusado de matar a golpes a su esposa en la vivienda que ambos compartían en Mos en diciembre de 2015, ha negado este lunes ser el autor del crimen y ha asegurado que, cuando llegó a casa, encontró a la víctima "tirada en el suelo" de la cocina y ya sin vida.
El juicio, que se celebra con jurado popular, ha comenzado este lunes en la Audiencia de Pontevedra y se prolongará a lo largo de toda la semana.
El acusado, que tan solo ha aceptado responder a las preguntas de su abogada, ha explicado que halló el cuerpo de la mujer "entre la cocina de hierro y la de butano" y que, tras encontrarla muerta y "sin tocarla", abandonó la vivienda y acudió al cuartel de la Guardia Civil de Mos.
Ha asegurado que no llamó al 112 ni a los servicios médicos porque "en ese momento me quedé bloqueado y solo pensé en ir a la Guardia Civil" y ha reconocido que pedir ayuda "ni se me pasó por el sentido".
La fiscal Patricia Andreu entiende que existen "elementos suficientes" para sostener que Florencio A.C., tras haber estado toda la tarde de bares, golpeó brutalmente a su esposa, Marina Rodríguez, por la espalda mientras preparaba la cena en la cocina.
La mujer cayó al suelo y, según la fiscal, "siguió golpeándola repetida e insistentemente", dándole "al menos tres golpes en la cabeza", todo sin que Marina pudiese defenderse "ni tampoco pedir ayuda".
Su defensa asegura que, con respecto a la presunta autoría del crimen, no existe "ningún vestigio, indicio ni mucho menos prueba concluyente" de que Florencio A.C. matara a su esposa y ha denunciado que se vulneraron derechos "fundamentales" de su cliente durante la instrucción de la causa.
Ante el tribunal también estaban citados este lunes los dos hijos de la pareja, si bien el mayor de los dos, que vivía con ellos, no quiso declarar en el juicio y el menor ha explicado que apenas tenía relación con sus padres desde hacía años, pero afirmó que nunca apreció episodios violentos entre el matrimonio.
La Fiscalía y la acusación popular, que ejerce la Xunta de Galicia, solicitan 22 años de prisión para el acusado como autor un delito de asesinato.
Además, exigen que se le prohíba residir en el domicilio del crimen y en el municipio de Mos durante los 27 años siguientes, así como el pago de indemnizaciones por un total de 75.000 euros a sus dos hijos y a los hermanos de su esposa, a los que no debería acercarse a menos de 500 metros durante 25 años.
El hombre ingresó en prisión preventiva dos días después del crimen, el 31 de diciembre de 2015, pero está en libertad desde febrero de 2017 por cuestiones de salud.
El acusado de matar a su esposa en Mos asegura que ya se la encontró sin vida
La fiscal sostiene que el hombre la sorprendió mientras preparaba la cena, golpeándola repetidas veces sin que pudiera defenderse
