BUEU. El Gobierno local logró ayer el apoyo de los grupos de la oposición, PP y PSOE, para aprobar inicialmente las nuevas ordenanzas municipales que regularán el uso de las playas y de las terrazas de los establecimientos hosteleros.
Ambas normativas fueron aprobadas por unanimidad, aunque los ‘populares’ y el portavoz socialista demandaron que se incluyesen ciertas modificaciones. Particularmente, ambos grupos cuestionaron el margen de tiempo que la ordenanza de terrazas establece para que los hosteleros unifiquen y renueven su mobiliario (en los casos en que corresponda), y para que sustituyan las mesas, sillas y otros elementos que no sean de madera o metal, o que incluyan rótulos publicitarios ajenos al nombre del local. La nueva regulación da como margen un año para esta actualización, un tiempo que PP y PSOE consideran escaso.
La concejala ‘popular’ Susana Canosa señaló que «debe haber más flexibilidad, ya que esto supone un gasto enorme para los locales, y algunos tienen buenas ganancias, pero a otros las mesas y sombrillas se las regalan las marcas». La edil calificó la medida de «dictatorial» tras entender que el valor de las multas, por este incumplimiento, es elevado.