El Diario Oficial de Galicia (DOG) publicó el viernes la licitación de la reforma de la estación de bombeo de Lameira, que tiene un importe de 1,2 millones de euros y un plazo de ejecución de doce meses.
La obra pretende mejorar la gestión de las aguas residuales que llegan a la red general desde el colector que discurre paralelo al río Lameira. En la actualidad, el bombeo que conecta el colector con la red general presenta diferentes carencias, tanto de capacidad como de regulación.
En esta actuación se construirá un nuevo bombeo para sustituir al actual. Tendrá un depósito anexo de retención de 800 metros cúbicos y estará equipado con tres bombas sumergibles para aguas residuales. Además, se instalarán nuevas tuberías de impulsión hacia la red general.
El proyecto cuenta con los informes favorables de los técnicos municipales y con las autorizaciones de compatibilidad urbanística, de afectación a los servicios municipales y con la disponibilidad de los terrenos afectados (la obra no afecta a ningún espacio de titularidad privada, ya que discurre íntegramente por espacios públicos).
Además, la obra cuenta con la supervisión de Augas de Galicia, el informe jurídico de la Secretaría, autorización de la Xefatura Territorial de la Consellería de Cultura y de la Demarcación de carreteras del Estado en Galicia para la canalización subterránea del saneamiento y de la Autoridade Portuaria, ya que la canalización discurre, en parte, por superficies de dominio público portuario.
Esta obra es la última que quedaba pendiente de licitar dentro del convenio de colaboración entre el Concello de Marín y la Xunta de Galicia para la ejecución de obras de saneamiento en el municipio. La causa que determina la prioridad de esta obra es que el colector actual se encuentra permanentemente en carga, por lo que en horas punta se producen alivios al mar a través de un canal de pluviales del Puerto.
Así, cuando llueve aumenta el caudal y los vertidos. En estas condiciones, entran en carga los colectores secundarios que llegan a interceptar, saltando las tapas, además de producirse alivios por el canal de pluviales y del aliviadero del bombeo.
La obra pretende aumentar la capacidad hidráulica, que pasará a tener un diámetro de 1.200 milímetros, y la de bombeo, que permitirá impulsar un volumen de 200 litros por segundo.
