El exministro de Fomento José Blanco ha querido, en el mismo día en que se abrió el plazo para la recogida de avales, trámite con el que se inicia la cuenta atrás para las primarias del PSdeG, recordar que no solo importa ganar "dentro del partido", "sino fuera y a Feijóo", el actual presidente de la Xunta.
El político lucense, en una entrevista con la Cadena Ser, ha querido brindar este lunes de nuevo su apoyo a la candidatura que encabeza el secretario general de los socialistas de Lugo y presidente de la Diputación Provincial, José Ramón Gómez Besteiro, y ha confesado que se vería "reconfortado" si éste asume el liderazgo.
"Tiene todas las cualidades", ha dicho Blanco, y no ha ocultado que a ambos los une "una amistad personal de hace mucho tiempo que trasciende la relación política", como tampoco que lo relevante no es el cargo, sino preparar a esta fuerza para ganar, "para ese gran reto en un momento en que Galicia se desangra".
Sin embargo, ha avanzado Blanco que presume que Besteiro será el próximo secretario xeral -"si así lo deciden los militantes", ha matizado- y también ha manifestado que con este proceso se cerrará" una etapa de incertidumbre después de un trabajo intenso aunque no reconocido de Pachi Vázquez", que la semana pasada anunció que no concurriría.
Ya centrándose en su propia persona, después de que recientemente el Tribunal Supremo anunciase el archivo de la causa por tráfico de influencias abierta contra él en el marco de la llamada operación Campeón, ha contado que estos 22 meses tan difíciles "vivió una pesadilla" ya que "aunque tenía la conciencia muy tranquila, no dormía muy bien".
La decisión de la Sala Segunda supone el cierre del caso y deja sin objeto la petición de suplicatorio que había solicitado el juez instructor de la causa.
La investigación a Blanco en el Supremo partió de las declaraciones prestadas en el Juzgado de Lugo -donde se instruye la causa principal por la Operación Campeón- por el principal imputado en este caso, el empresario Jorge Dorribo.
Se centró en la supuesta mediación de Blanco en la concesión de autorizaciones para instalar una nave industrial de Transportes Azkar, propiedad del empresario gallego José Antonio Orozco, amigo del exministro, en unos terrenos próximos al aeropuerto del Prat, en Sant Boi.
El Supremo dictaminó que Blanco no ejerció "predominio o fuerza moral" sobre el funcionario responsable y la resolución, finalmente favorable al empresario José Antonio Orozco, respondió a "criterios técnicos" y no a ninguna influencia exterior al funcionario responsable.
Este lunes, el propio Blanco ha dicho a la mencionada emisora que todo fue "una pesadilla a partir de una infamia lanzada por un señor (Dorribo) con el único objetivo de salir de prisión. No tuvo inconveniente en imputar falsos testimonios como se demostró con el alcalde de Lugo, con el presidente de la Audiencia, hacia mí mismo o también hace poco con el portavoz del PP en el Senado, Xosé Manuel Barreiro".
Bajo su criterio, "la justicia va a poner las cosas en su sitio. Al final, aunque sea tarde, las cosas van saliendo".
Tras esta explicación, ha reiterado que "desde una segunda línea" siempre va a estar ahí para ayudar a su formación "y contribuir más desde la experiencia".
José Blanco recuerda que no solo importa ganar dentro del partido sino también a Núñez Feijóo
