El colectivo logró la inserción laboral de 188 parados

Bronca y notaria a pie de urna en las elecciones de la patronal dezana

Tras más de cuatro horas, entre la asamblea anual y la votación a la directiva, partidarios de Antonio Lamas y de Gerardo López se enzarzaron en una larga discusión por el voto delegado
Los dos candidatos, Gerardo López y Antonio Lamas, votando en la sede de la AED
photo_camera Los dos candidatos, Gerardo López y Antonio Lamas, votando en la sede de la AED

Las elecciones a la directiva de la patronal dezana estuvieron este jueves marcadas por una dura bronca. Tras las votaciones, el bando de Gerardo López, que llevó a la notaria a pie de urna, quiso impugnar los votos delegados. El asesor jurídico de la AED dijo que no procedía.

La cita fue histórica, tanto como la imagen de la sede abarrotada de empresarios (estaban los más relevantes, incluida la familia Cuíña y el alcalde), pero también de hosteleros y pequeños comerciantes. Nunca en la larga trayectoria del colectivo se habían enfrentado dos candidaturas. Y nunca la participación en la elección de directiva fue tan masiva. ¿El motivo? Político. Desde el inicio del Gobierno de Rafa Cuíña las relaciones entre el Concello y la patronal se torcieron hasta un punto de difícil retorno.

Ambas partes guardaron las formas, pero la convocatoria de los comicios hizo estallar por el aire una fingida sintonía. Antonio Lamas se presentó a la reelección. Pero antes de conocerse su decisión había ya una candidatura gestada en la sombra, encabezada por Gerardo López, que la rival consideró auspiciada por el Ejecutivo de Cuíña. Lamas incluso acusó veladamente al alcalde de coaccionar a los empresarios y el regidor dijo que eso demostraba su "escasa intelixencia".


La AED debe 231.000 euros de hipoteca de su sede y cerró 2015 con un déficit de 5.000


Previamente a la elección de la nueva directiva, la patronal dezana celebró otra asamblea en la que se expusieron las cuentas de 2015 (aprobadas por mayoría con una sola abstención) y se esbozó el presupuesto para este año, que consiguió la unanimidad de voto. No hubo ninguna intervención en el turno de ruegos y preguntas.

El pago de la hipoteca del local que hace ya varios años adquirió el colectivo continúa siendo su gran lastre económico. La AED aún adeuda casi 231.000 euros de dicha hipoteca, en concreto, 230.979 euros, lo que representa la mayor parte del pasivo no corriente, que es de 241.396 euros. Solo en 2015, la asociación pagó en concepto de intereses financieros de la hipoteca 7.263 euros, si bien la cifra se redujo bastante respecto a 2014, cuando se abonaron por este concepto 9.657 euros. La deuda a corto plazo es de 75.383 euros y, por lo que respecta a la de acreedores, se sitúa en 24.963 euros, de los que 13.280 corresponden a varios proveedores y 4.321 a la Seguridad Social.

Las cuotas de los usuarios y socios supusieron unos ingresos de 76.703 euros, bastante menos que las subvenciones recibidas, que ascendieron a 83.167 euros. Los gastos de explotación y de pago al personal y a docentes están bastante igualados (84.341 y 82.328 euros, respectivamente). El resultado del ejercicio de 2015 arroja un déficit de algo más de 5.000 euros (5.054,22). Frente a este desfase, la previsión para este año es la de cerrar las cuentas en positivo, con 3.000 euros de superávit. La directiva de Lamas prevé unos ingresos de 170.000 euros (las cuotas de los socios pasarían a suponer 80.000) y unos gastos de 167.000 euros. 

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