Caldas quiere exponer su propia opinión sobre la continuidad de la Variante

El alcalde, Juan Manuel Rey, anunció que solicitará una entrevista con los representantes del Ministerio de Fomento en Galicia
Imagen de la calle Juan Fuentes, que se encuentra en la carretera de acceso a Vilagarcía
photo_camera Imagen de la calle Juan Fuentes, que se encuentra en la carretera de acceso a Vilagarcía

Tal como había quedado acordado en una decisión adoptada por unanimidad por la Corporación municipal de Caldas de Reis, en una sesión plenaria celebrada en el año 2015, el Gobierno local de la localidad termal solicitará una entrevista con los representantes del Ministerio de Fomento con el objetivo de hacerles saber su opinión antes de que el inicio de la elaboración del anteproyecto pueda condicionar que sean tenidas en cuenta algunas de sus peticiones con respecto a esta infraestructura.

Con esta finalidad, el alcalde, Juan Manuel Rey, anunció este lunes que solicitará una entrevista con el director general de la demarcación de Carreteras del Estado, Ángel González del Río, y expresó su deseo de que el encuentro se produzca cuando antes, sin descartar la posibilidad de que pudiese tener lugar esta semana. El portavoz de Independientes de Caldas de Reis, Fernando Pérez, hizo público el deseo de su formación de participar en la entrevista, que podría tener como escenario A Coruña o Caldas de Reis, y el regidor no puso reparos, aunque puntualizó que la presencia de los representantes de los grupos de la oposición es una cuestión que corresponde decidir al Ministerio de Fomento. Juan Manuel Rey apuntó que la opción de que la variante de Valga tenga continuidad hasta Caldas de Reis se baraja desde el momento en que se proyectó esta infraestructura, y agregó que está concebida para reducir el número de vehículos que cruzan la localidad. Respecto a su itinerario, aseguró que no conoce el más mínimo detalle, y agregó que una posibilidad es que concluya a la altura de Tibo.

La construcción de esta vía podría servir de acicate para que los automovilistas utilicen también la Variante actual, cuya construcción no bastó para evitar el paso de camiones por el casco urbano.

Esta situación fue reconocida por el alcalde en el año 2012, cuando presentó los datos de un estudio. Entonces dijo que, aunque no contaba con cifras concretas, "es perceptible a simple vista", y agregó que había empezado a notarse seis meses después de su apertura.

REPUNTE. "Notamos un repunte fuera de horas punta. Se ahorran tres kilómetros, pero como van con prisa van a unas velocidades elevadas", expuso entonces el jefe de la Policía Local, Manuel Castro.

Son estos conductores los principales infractores de los límites de velocidad establecidos y el motivo por el que el Gobierno local se hubiese planteado la posibilidad de instalar radares en los principales accesos a la villa.

El tráfico rodado es uno de los grandes problemas de Caldas de Reis, porque el paso de camiones y coches es muy intenso en varias calles de la localidad que también sirven de entrada y salida de la misma, donde están situados servicios públicos, circunstancia que conlleva la presencia de un alto número de personas, como sucede con los colegios Alfonso VII, La Encarnación y San Fermín.

Por otra parte, al tratarse de carreteras convertidas en calles, su gestión no corresponde al Concello, por lo que el Gobierno local no puede adoptar medidas como la instalación de bandas sonoras o badenes para mejorar las condiciones de seguridad de los peatones.

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